La Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos ha hecho un llamamiento a las autoridades de Israel para que lleven a cabo una investigación "rápida, transparente y detallada" sobre las circunstancias del ataque de este martes contra un edificio residencial en la ciudad de Beit Lahia, en el norte de la Franja de Gaza, y en el que han fallecido más de 90 personas.
"Los civiles están protegidos por el Derecho Internacional Humanitario", ha manifestado el portavoz de la oficina, Jeremy Laurence, que ha reconocido estar "consternado" por este ataque contra un edificio de cinco plantas que albergaba a "niños, mujeres y ancianos". Entre los fallecidos hay al menos 25 niños, por lo que se trata de "uno de los ataques individuales más mortíferos en Gaza en casi tres meses".
Así las cosas, Laurence ha recalcado que es "imperativo" que las autoridades israelíes permitan el acceso de los servicios de emergencias a las zonas afectadas por sus ataques en el norte de Gaza, y ha denunciado que en algunos casos son los propios trabajadores de rescate quienes sufren los ataques, según se desprende de un comunicado difundido por la oficina de Derechos Humanos.
"Los hospitales también ha sido atacados y ahora están prácticamente fuera de servicio. Los hospitales, las ambulancias y el personal médico están específicamente protegidos de los ataques por el Derecho Internacional Humanitario, o de cualquier uso con fines militares", ha remachado Laurence, que finalmente ha subrayado la necesidad de un alto el fuego.
Las autoridades sanitarias de la Franja de Gaza, controladas por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), han denunciado este martes que al menos 93 personas han fallecido víctimas de un ataque del Ejército de Israel contra un edificio residencial en la localidad de Beit Lahia, en el norte del enclave, en medio de la ofensiva a gran escala lanzada durante las últimas tres semanas por las tropas israelíes contra esta zona.