París, 29 oct (EFE).- El Tribunal Correccional de París juzgó este martes a tres policías franceses acusados de dar una paliza a un hombre peruano dentro de una comisaría del centro de París el pasado julio, y anunció que publicará la sentencia el 15 de enero de 2025.
Así lo confirmó a EFE Juliette Chapelle, una de las dos abogadas del ciudadano peruano, de 42 años e identificado con el nombre ficticio de Mario.
Dos de los agentes fueron juzgados por los cargos de "violencias voluntarias cometidas por parte de personas depositarias de la autoridad pública" y un tercero, que era el responsable de la comisaría en el momento de los hechos, por "no asistencia de una persona en peligro".
En la vista que se prolongó durante más de 10 horas y que contó con un buen número de periodistas en la sala, Mario no estuvo presente por recomendación de su psiquiatra, explicó en el inicio de la sesión la letrada Chapelle.
Los que sí estuvieron fueron los tres miembros de la Policía Nacional francesa encausados: Maxime D. y Matthieu D., señalados de violencias voluntarias, y Clément B., por no asistencia.
Durante la audiencia, el presidente del Tribunal proyectó las imágenes del circuito de video-vigilancia de la comisaría -el mismo que se filtró a los medios en septiembre y destapó el caso públicamente- y confrontó a los tres por las agresiones filmadas.
En las imágenes, se ve a un hombre sin camiseta golpeado repetidamente por un agente, mientras el resto se ríe o no hace nada.
Uno de ellos es el que era el responsable de la comisaría en ese momento, Clément B., quien justificó este martes la violencia empleada por sus subordinados porque "se sintieron intimidados por el físico" del cuadragenario.
"¿De verdad? ¿Se sintieron intimidados por un hombre que mide 1,66 metros?", inquirió el presidente del tribunal. Los agentes también explicaron su actitud por el "estrés" que vivían en la víspera de los Juegos Olímpicos de París.
Mario, quien había sido llevado a la comisaría sobre las 23 horas del 24 de julio tras injuriar a un gendarme en pleno centro de París -hechos que el denunciante admite-, recibió golpes de tal calibre que su brazo resultó roto y la arcada de su ceja sangró.
El peruano llegó a escribir "ayuda" en la pared de su celda con esa misma sangre. Por los golpes y las heridas que sufrió, los médicos le prescribieron una baja de 45 días.
Aunque los cargos contra los dos policías juzgados por agresiones puedan implicar, en teoría, de entre 3 a 7 años de cárcel, ambos evitarán con casi total probabilidad la prisión firme.
No obstante, podrían ser apartados del cuerpo por sanciones disciplinarias, temporal o definitivamente.
Además del eco mediático de la filtración del video, el caso llegó a los tribunales porque uno de los agentes que presenció las agresiones se retractó con su testimonio.
En un primer momento, había respaldado durante la investigación la versión de Maxime D., quien argumentaba haberse defendido ante un supuesto gesto de agresión por parte de Mario.
Sin embargo, posteriormente reconoció haber mentido como manera de encubrir a su compañero. EFE