El asilo en Países Bajos tiende a la baja, en contra de la alarma de la derecha radical

Solicitudes de asilo en Países Bajos disminuyen 23 % en el último trimestre, mientras el Gobierno propone medidas de control y restricciones para enfrentar la supuesta crisis de llegadas

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La Haya, 29 oct (EFE).- Las solicitudes de asilo presentadas en Países Bajos durante el último trimestre fueron un 23 % menos que el mismo periodo del año pasado, una tendencia a la baja que también siguen las reagrupaciones familiares, a pesar de que el actual Gobierno neerlandés, liderado por la derecha radical, insiste en que el país afronta una “crisis” de llegadas.

Según los datos publicados este martes por la Oficina Central de Estadísticas (CBS), durante el tercer trimestre de este año, un total de 8.100 personas presentaron su primera solicitud de asilo en Países Bajos, esto es un 23 % menos que en el mismo trimestre del año pasado

También llegaron al territorio neerlandés 2.650 familiares reagrupados por refugiados, 130 menos que en el mismo periodo en 2023, siendo en su gran mayoría parientes de ciudadanos sirios, seguidos de turcos y eritreos, y con una reducción del 41 % en reagrupados de Irak.

Estos números se basan en las cifras oficiales del Servicio de Inmigración y Naturalización (IND), y comparados con la misma época de 2023, este trimestre se presentaron 2.400 solicitudes de asilo menos, con una disminución importante de las peticiones de asilo de sirios.

La mayoría de las personas que solicitaron asilo en Países Bajos en el último trimestre tienen menos de 35 años, y un 29 % son menores de 18 años. En concreto, tres cuartas partes de los solicitantes fueron hombres, un dato previsible ya que son ellos los que hacen el peligroso trayecto hacia Europa para después reagrupar legalmente a sus parejas e hijos.

Sin embargo, esta tendencia a la baja se contradice con la alarma declarada por el Gobierno neerlandés, una coalición de cuatro partidos en la que la derecha radical tiene mayoría. El pasado viernes, acordó un paquete de “medidas de emergencia” para “aliviar la presión” sobre el sistema del asilo, al considerar que Países Bajos está “en una crisis de asilo” y el régimen actual es “insostenible”.

Entre otras cosas, planea reintroducir controles fronterizos a partir de finales de noviembre para devolver a Alemania y Bélgica a migrantes en situación irregular y refugiados que hayan solicitado asilo en otro país europeo.

También eliminará el permiso de residencia indefinido para refugiados y reducirá la duración del permiso temporal a tres años, en lugar de cinco, para "generar la conciencia de que es temporal", señaló el primer ministro, Dick Schoof, que prometió que “las entradas disminuirán y las salidas aumentarán”, puesto que también se pondrá fin a la posibilidad de reagrupar hijos adultos o una pareja sin matrimonio.

Además, el Ministerio neerlandés de Exteriores publicará antes de fin de año un informe en el que identifica “zonas seguras” en Siria, y los solicitantes de asilo que sean de esas áreas ya no serán elegibles al asilo y deberán regresar al país árabe, mientras se evalúa la posibilidad de revocar el permiso de residencia de refugiados sirios ya asentados legalmente. EFE

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