Caracas, 28 oct (EFE).- Tres meses después de las presidenciales, en Venezuela nadie cede un centímetro en sus reclamos, con una oposición que denunció fraude en el resultado que favoreció a Nicolás Maduro, y un chavismo que defiende esa victoria, al tiempo que ve como un golpe de Estado las críticas, dentro y fuera del país, a la reelección anunciada.
Aunque el Consejo Nacional Electoral (CNE) -controlado por rectores cercanos al Gobierno- proclamó ganador a Maduro el 28 de julio, todavía no ha publicado un respaldo de ese resultado, pese al incesante pedido de transparencia que ha hecho la comunidad internacional, especialmente los numerosos países que no reconocen la victoria chavista.
Del otro lado, la principal coalición opositora -Plataforma Unitaria Democrática (PUD)- insiste en que su candidato, Edmundo González Urrutia -exiliado en España desde el 8 de septiembre-, ganó la Presidencia por amplio margen, y se ha encargado de difundir el "83,5 % de las actas electorales" que demostrarían ese desenlace, pese a que el oficialismo las tacha de "falsas".
Con este escenario, hay dos hombres que se preparan para jurar como jefe de Estado el 10 de enero de 2025 -la fecha que indica la Constitución para comenzar el sexenio presidencial-, pero solo uno está en el país respaldado por todas las instituciones del Estado, especialmente las Fuerzas Armadas, y espera continuar en el cargo que ocupa desde 2013.
Para conmemorar los tres meses, la líder opositora María Corina Machado, la principal valedora de González Urrutia, difundió un documental que repasa el día de las votaciones y reitera la denuncia de fraude, bajo la consigna de que "la lucha es hasta el final", como siempre dice, lo que apunta a sacar al chavismo del poder, al que llegó democráticamente en 1999.
Machado, cuyo paradero mantiene en secreto ante las amenazas de cárcel por parte del Ejecutivo, asegura que "todos saben" que Maduro perdió los comicios y con base en esa "certeza" -prosigue- instancias, entre otras, el Parlamento Europeo o, justo hoy, la Cámara de Panamá, aprueban resoluciones en las que reconocen a González Urrutia como presidente electo de Venezuela.
"Lo hicimos, lo logramos juntos, tengámoslo muy presente todos los días, mientras seguimos luchando por cobrar nuestra victoria. Todos lo saben: ese día ganó Edmundo González y ganó Venezuela", escribió la exdiputada en la red social X, en la misma plataforma que otros dirigentes de la PUD se manifestaron, sin ninguna actividad de calle.
También hoy la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, recibió en Roma a González Urrutia, a quien reiteró el apoyo italiano "a los esfuerzos para facilitar la transición democrática" en Venezuela.
Con esta clase de respaldos, casi todos simbólicos, la PUD ha mantenido su reclamo, así como la exigencia de la liberación de cerca de 2.000 personas -entre ellos 68 menores- que permanecen presas, tras haber sido detenidas en el contexto poselectoral, algunas en medio de protestas contra el "fraude" y otras en operativos policiales y militares.
Con un tono de mayor celebración, el chavismo organizó actos en Caracas y otras ciudades para conmemorar "los tres meses de la victoria de la paz", según informaciones difundidas por el canal estatal Venezolana de Televisión (VTV), que describe a Maduro como el vencedor frente a los "planes golpistas" de la oposición y del "imperialismo".
El propio mandatario recordó el 28 de julio como el día de un "contundente triunfo popular" que le dio, según el boletín del CNE, el 51,95 % de los votos para mantenerse en el poder.
"La batalla por la paz la estamos ganando, será una nueva victoria frente al golpismo y el fascismo", expresó en Telegram el jefe de Estado, que participó la semana pasada en la cumbre del grupo de economías emergentes BRICS, en Rusia, de donde volvió sin haber logrado la admisión de su país al bloque.
Asimismo, el ministro de Interior, Diosdado Cabello, encabezó un acto en Caracas en el que subrayó que "se acabó la impunidad", por lo que quien "atente contra la revolución" tendrá a "la justicia detrás".
"Aquí no van a volver a gobernar, ni por las buenas ni por las malas", expresó el número dos del chavismo.