La exfutbolista española Marta Corredera ha deseado que sus dos hijas recuerden que su madre fue "valiente" al quedarse embarazada siendo jugadora profesional en un deporte "muy machista", y ha desvelado que no todo el mundo se tomó bien su decisión de ser madre, además de asegurar que están "a años luz" de tener las mejores condiciones, aunque estamos "en el camino".
"Me gustaría que ellas, cuando les hablen de su madre, recuerden que siempre ha estado, que no ha dejado nunca de trabajar. Ellas han sido pieza importante para empezar este cambio. Me gustaría que dijeran 'mi madre, aparte de ser una buena futbolista, inició algo que muy poca gente tiene la capacidad de iniciar, fue capaz de ser valiente, de quedarse embarazada en un deporte muy machista, donde prácticamente no había precedentes. Cuando sean conscientes, creo que estarán orgullosas", señaló durante una charla sobre 'Deporte y maternidad' con la periodista Laura Martín en la primera edición del 'Congreso Deporte en Positivo AS', celebrado este lunes en el Hotel Ritz de Madrid.
La catalana explicó lo "complicado" que fue tomar la decisión de buscar ser madre. "Lo primero que se te viene a la cabeza es qué van a pensar de mí, cómo me van a juzgar, porque eres una pieza clave en un equipo, no es tan fácil sustituirte. Se te vienen muchas dudas a la cabeza, pero también es verdad que yo llevaba muchos años ya en este mundo del deporte; empecé a los 14-15 años en la élite y me quedé embarazada con 31, son muchos años sin parar, priorizando la vida deportiva antes que la personal. Decidí que era el momento de priorizar mi vida personal y mi futuro, que es lo que va a quedar el día de mañana", apuntó.
Además, Corredera, que entonces era jugadora del Real Madrid, reconoció que no todo el mundo entendió su decisión. "No, eso es imposible. Intentar agradar a todo el mundo en la vida es imposible, nadie lo consigue, y lo que tienes que hacer es mirar por ti y por tu felicidad", subrayó.
Por otra parte, la de Terrassa recordó todos los cambios físicos y emocionales que vivió tras ser madre. "Cuando estaba en activo tenía un abdomen superfuerte, siempre he sido una chica muy atlética. Igual suena un poco desagradable, pero nunca se me olvidará que mi marido me dijo que en la cesárea había un médico por cada lado de mi abdomen tirando para intentar abrirme. ¿Cómo no te va a quedar secuelas? Es imposible. Es un cambio muy grande y aceptar eso también es complicado", expresó.
"Lo primero que hace falta es la normalización. La deportista es una mujer como cualquier otra y tiene el derecho de quedarse embarazada, de conciliar y de tener una familia. Lo segundo, las condiciones que se encontrarán. Desde el postparto de Ona, uno de mis objetivos fue normalizar esa situación y que las condiciones de las deportistas acabasen siendo mejores de lo que son ahora. Estamos a años luz de estar preparados, pero estamos en el camino", afirmó.
Además, tras finalizar la baja de su segunda hija, volvió a la actividad laboral, algo imprescindible para sentirse "realizada". "Ahora mismo estoy tirando de todo el mundo, mi madre el otro día vino conmigo a Badajoz con la peque, se quedó mi marido con la mayor, ahora los he secuestrado a todos a venir aquí conmigo, mañana tengo otra vez retransmisión con Televisión Española aquí en Madrid. Está siendo un poco caos, porque la conciliación y la maternidad o paternidad es complicada si quieres seguir formándote en el mundo laboral. También creo que es algo que ha cambiado mucho y que está muy normalizado; tengo mucha suerte de tener a la persona que tengo al lado, que está al 100% en este camino conmigo", indicó.
"Somos personas y estamos viviendo una situación fuera de lo normal, personas muy pequeñitas dependen 100% de ti las 24 horas del día y es imposible que llegues a todo. En el posparto del primer embarazo, yo psicológicamente estaba muy mal y no fui capaz de darme cuenta y pedir ayuda, salí de ahí prácticamente yo sola con mi pareja y un círculo muy reducido. Me afectó mucho lo que decía la gente por el hecho de que no volví a jugar; arrastré una lesión del abdomen a raíz de la primera cesárea. Yo estaba en un momento psicológico muy complicado y me afectó mucho lo que la gente decía de mí. Hay que empezar a normalizar que la mujer sufre", apuntó.
Por último, Corredera bromeó sobre los mayores gastos siendo madre. "La mayor inversión es en pañales, en eso y en pastillas para relajarte, que te hagan decir 'no he dormido, pero no pasa nada'", dijo entre risas.