Jerusalén, 28 oct (EFE).- El Ejército israelí mantiene sus operaciones en el sur de Líbano, donde lleva casi un mes de ofensiva terrestre contra Hizbulá, mientras en Israel se detectó el lanzamiento de unos 15 proyectiles contra la localidad de Kiryat Shmona.
En las últimas horas, los soldados israelíes "localizaron armas de Hizbulá, realizaron ataques aéreos contra milicianos y destruyeron lanzacohetes utilizados para disparar contra comunidades israelíes", según un comunicado castrense.
El Ejército informó además de un incidente en el que los soldados identificaron a un grupo de combatientes que suponía una amenaza para las tropas, y dieron indicaciones a la fuerza aérea para atacarlo.
Mientras, unos 15 cohetes fueron lanzados contra la localidad israelí de Kiryat Shmona, en el norte del país. Algunos fueron interceptados y otros hicieron impacto sin causar víctimas, recoge el medio israelí Haaretz.
Además, el Ejército dijo haber interceptado un dron que cruzó desde Líbano hacia la zona de la Alta Galilea.
Este lunes, Hizbulá y la aglomeración de grupos chiíes proiraníes Resistencia Islámica en Irak reivindicaron cuatro ataques con drones y andanadas de proyectiles contra el norte de Israel y concentraciones de soldados en la frontera, según sendos comunicados de las formaciones.
"Los muyahidines de la Resistencia Islámica en Irak atacaron un objetivo militar en el norte de los territorios ocupados con aviación no tripulada", dijo un comunicado de las milicias iraquíes en Telegram.
Por su parte, Hizbulá anunció en varios comunicados que sus combatientes llevaron a cabo seis ataques con andanadas de proyectiles contra "grupos de soldados del enemigo israelí", dos de ellos en un punto ubicado "entre los asentamientos de Al Manara y Margaliot", en el otro lado de la frontera líbano-israelí.
En más de un año de fuego cruzado entre Hizbulá e Israel, al menos 63 personas han muerto en territorio israelí (31 civiles, dos ciudadanos extranjeros y 30 soldados), según datos publicados por la Oficina del Primer Ministro.
En Líbano han sido más de 2.600 los muertos, la mayoría en el último mes de escalada bélica, en el que Israel ha lanzado una campaña de bombardeos masivos y una invasión terrestre del país vecino que han obligado a más de un millón de personas a huir.