La Unión Tranviarios Automotor (UTA), el sindicato que agrupa a los trabajadores de la rama del transporte colectivo en Argentina, ha convocado un paro de autobuses para el próximo jueves 31 de octubre, un día después de la huelga general del resto de medios de transporte del país.
El anuncio se ha producido una vez que el sindicato ha concluido sin éxito el proceso de concertación salarial en el que estaba inmerso de forma tripartita junto al Gobierno y los empresarios del sector.
"Llegamos al fin de la conciliación obligatoria sin ninguna oferta salarial, pese a que el Estado les otorgó a los empresarios una partida para los salarios del personal de 17.877 millones de pesos que pareciera haber sido utilizada para otros conceptos", ha señalado la UTA.
El sindicato ha expresado que en todo momento ha sido "paciente" y ha tolerado las negociaciones dispuestas obligatoriamente por el Estado con la intención de solucionar las causas que le llevaron a esta situación, pero solo ha servido para postergar las medidas de fuerza que ya habían anunciado.
La medida de fuerza tendrá una duración de 24 horas, desde las 00.00 horas del próximo jueves, justo después del final del paro de transportes en otros sectores, como los ferrocarriles o los barcos.