La Comisión Permanente de la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte avanzó este lunes que ya está estudiando las imágenes del Clásico entre Real Madrid y FC Barcelona en las que se profieren insultos racistas contra los jugadores azulgranas Lamine Yamal, Raphinha y Ansu Fati, con el objetivo de "depurar las responsabilidades pertinentes".
Antiviolencia se reunió este lunes en la sede del Consejo Superior de Deportes (CSD) para abordar los incidentes ocurridos este sábado en el estadio Santiago Bernabéu durante el Clásico entre el Real Madrid y el FC Barcelona.
Ante estos, en referencia a los insultos racistas de "mena de mierda" y "puto negro" hacia Yamal, Raphinha y Ansu Fati --este último en el calentamiento e la banda--, Antiviolencia expresó su "rotunda condena ante cualquier acto y expresión de violencia, racismo, xenofobia, odio o intolerancia en el fútbol". "Este tipo de comportamientos son inadmisibles y están totalmente alejados de los valores de convivencia y respeto inherentes al deporte", agregó el comunicado.
En relación con el Clásico, la Comisión informó de que ya ha comenzado la revisión de los vídeos e imágenes disponibles "con el fin de depurar las responsabilidades pertinentes". "Se están estudiando imágenes no solo de los incidentes ocurridos durante la celebración de uno de los goles por parte de los jugadores del Barça, sino también de los insultos proferidos contra algunos jugadores del equipo visitante durante su calentamiento", expresaron.
"Para la erradicación de este tipo de actitudes y comportamientos, resulta imprescindible el trabajo coordinado de todos los actores implicados y, en especial, la colaboración de los clubes para lograr la identificación de aquellos individuos que, enmascarados en la masa, llevan a cabo conductas individuales inaceptables que afectan al resto de aficionados", advirtió el texto.
Además, Antiviolencia informó de que a la reunión en el CSD de este lunes acudió, a petición propia, el consejero delegado del Atlético de Madrid, Miguel Ángel Gil Marín, quien explicó "el trabajo que viene realizando con el objetivo de expulsar de su estadio a todos aquellos individuos que sean merecedores de sanciones por la Comisión", ofreciendo "la máxima colaboración para llevar a cabo su identificación".
En relación con esto, Antiviolencia informó de una propuesta de sanción de 6.000 euros y prohibición de acceso a los recintos deportivos a cinco aficionados que, "además de arrojar diversos objetos al terreno de juego, profirieron graves insultos contra los jugadores visitantes con ocasión del encuentro Atlético de Madrid-Real Madrid".
Y otro aficionado podría enfrentarse a una multa económica de 3.001 euros y la prohibición de acceso a los estadios por un periodo de seis meses, por arrojar un objeto al terreno de juego en el derbi madrileño del Metropolitano.