El PMA advierte que la "crisis en espiral" que vive Haití puede llevar a los jóvenes a manos de grupos armados

Haití enfrenta una crisis humanitaria severa con 5,4 millones de personas en hambre aguda, mientras la violencia de pandillas amenaza a la juventud y desencadena un aumento del desplazamiento interno

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El Programa Mundial de Alimentos (PMA) ha lamentado este viernes que "la incertidumbre política, la violencia desenfrenada de las pandillas y la inseguridad alimentaria" han hecho que Haití caiga en "una crisis en espiral" que hace especialmente vulnerable a la juventud del país, donde al menos la mitad de la población sufre "hambre aguda".

En total, son alrededor de 5,4 millones de haitianos los que se encuentran en esta situación de hambre aguda, según datos de Naciones Unidas. Esta cifra incluye a unas 6.000 personas desplazadas internamente (IDP) que se refugian en lugares donde "se manifiestan condiciones similares a la hambruna", ha explicado la directora de la agencia en el país, Waanja Kaaria.

Kaaria ha destacado que hay, además, 270.000 niños que padecen desnutrición aguda en todo el país y ha advertido de que "el hambre aumenta significativamente la probabilidad de recurrir a mecanismos de supervivencia adversos, y especialmente grave para los jóvenes es el riesgo de ser reclutados por grupos armados y caer en la delincuencia".

Esta situación se ha visto agravada por el incremento de los ataques de bandas armadas --especialmente en la capital, Puerto Príncipe-- y ha duplicado en apenas tres meses la cifra de personas que se han visto obligadas a huir e sus hogares, ascendiendo a más de 700.000 el desplazamiento total.

En este contexto, las labores humanitarias de Naciones Unidas en el país se vieron interrumpidas temporalmente después de que bandas armadas abrieran fuego este jueves contra un helicóptero de la organización que sobrevolaba Puerto Príncipe.

Haití no tiene presidente desde que a principios de julio de 2021 un grupo de sujetos armados irrumpiera en su residencia oficial y asesinara a Jovenel Moise. Poco después, Ariel Henry ascendió al puesto de primer ministro entre críticas y tras varios años de inestabilidad. En marzo de este año presentó su dimisión tras la oleada de violencia que sacudió la nación caribeña.

El Consejo Presidencial de Transición acabó designando a Garry Conille para llevar a cabo la tarea de paficicación en calidad de jefe de Gobierno. Su gabinete ha anunciado la creación de un Consejo Electoral Provisional para organizar las primeras elecciones en una década.

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