El líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, ha afirmado este jueves que el partido-milicia chií libanés Hezbolá está vivo tras la muerte del secretario general, Hasán Nasralá, y su primo Hashem Safiedín, considerado su sucesor, y ha sostenido que "es el más fuerte defensor de Líbano".
"Hoy, en apariencia, dirigentes como Nasralá y Safiedín no están presentes junto a sus coetáneos, pero su espíritu y su liderazgo están presentes en el campo de acción y defienden a Líbano y a su indefensa población. Hoy es Hezbolá el más fuerte defensor de Líbano y el más sólido escudo frente a la codicia de régimen sionista que, desde hace tiempo, se ha dado como objetivo fragmentar el Líbano", ha declarado.
Jamenei ha señalado que Israel "se esfuerza por refutar el abnegación papel desempeñado por Hezbolá a favor de Líbano", pero "Hezbolá vive y crece, cumpliendo su papel histórico". Así, ha agregado que Irán "ayudará siempre a los combatientes" y a quienes "resisten a la ocupación de la banda criminal que usurpa Palestina".
En la víspera, el líder supremo de Irán aseguró que el destino de la región de Oriente Próximo "habría sido diferente" de no ser por la presencia de "grandes" figuras como el líder del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), Yahya Sinwar, o en Nasralá.
En este sentido, subrayó que la resistencia de los movimientos palestinos y Hezbolá en la Franja de Gaza y Líbano ante los ataques del Ejército de Israel han "marcado historia" y que la situación en la región ha llegado a tal punto que es "un gran fracaso no solo para Israel, sino para la civilización y la cultura occidental".