El Tribunal Constitucional de Taiwán ha anulado las secciones más controvertidas de una legislación aprobada por el Parlamento, controlado por la oposición prochina, que amplía los poderes del legislativo frente al Gobierno del presidente William Lai.
El fallo de este viernes es un golpe para el Kuomintang (KMT) y el Partido Popular de Taiwán (PPT), que con sus votos favorables dieron 'luz verde' a la ley en un intento por controlar al Gobierno en minoría de Lai, defensor del estatus actual de la isla frente a las ambiciones soberanistas de China.
En concreto, la corte ha catalogado de "inconstitucional" la sección de la ley que contempla sanciones a los funcionarios por negarse a comparecer o ausentarse ante la Cámara en caso de una audiencia o comisión de investigación. La medida proponía multas de hasta 200.000 nuevos dólares (5.700 euros) por desacato.
Asimismo, el Constitucional también ha fallado en contra de que el presidente exponga sus políticas en un discurso a la nación ante la Cámara, algo que era opcional hasta ahora, según ha recogido la agencia de noticias CNA.
La medida ha provocado descontento en la población taiwanesa. Lai defiende que Taiwán fue fundada antes de que existiera la República Popular de China, por lo que, "en términos de edad", "es imposible que China sea la patria de la gente que vive en Taiwán".