Redacción deportes, 25 oct (EFE).- Con la expulsión a la media hora de Antoine Makoumbou, el Udinese aprovechó su superioridad numérica para ganar 2-0 al Cagliari y conseguir tres puntos con los que, a falta de disputarse el resto de la novena jornada de la Serie A, ocupa uno de los puestos con acceso a la próxima edición de la Liga de Campeones.
Los hombres dirigidos por Kosta Runjaic no desaprovecharon las dos cartulinas amarillas que recibió Makoumbou entre los minutos cinco y treinta del choque. Después tres derrotas en los últimos cinco encuentros, el Udinese necesitaba una victoria para mantenerse en puestos europeos. La consiguió e igualó a puntos con el Milan para colocarse cuarto sólo por detrás del Nápoles, el Inter y el Juventus.
Fue Lucca Lorenzo, al filo del descanso, quien abrió el marcador con un espectacular cabezazo a pase de Hassane Kamara desde la banda derecha. El delantero del Udinese se elevó entre toda la defensa del Cagliari y conectó un remate imparable con el que firmó su cuarto tanto del curso.
Después, en la segunda parte, Keinan Davis cerró el marcador y sentenció el partido cuando restaban apenas doce minutos para el final. Se estrenó en la Serie A con un gran gol: regateó al borde del área a Sebastiano Luperto, se sacó de la chistera un zapatazo imparable y el Udinese culminó una victoria que vale una cuarta plaza provisional. EFE