Lima, 23 oct (EFE).- El paro convocado este miércoles en Lima por el gremio de transportistas, al que se sumaron varios sectores más, acabó su recorrido frente al Congreso peruano para reclamar medidas efectivas contra la ola de extorsión que azota el país y expresar su malestar ante el aumento de inseguridad ciudadana.
La jornada de protesta partió temprano desde varios puntos de la capital peruana y transcurrió pacífica de forma general, aunque la Policía Nacional informó que detuvo a seis personas en pequeñas manifestaciones desarrolladas en las regiones de Piura y Huánuco, ambas en el norte.
La razón del paro fue el pedir a las autoridades más acción contra la delincuencia, y en especial la extorsión. Fue convocado por gremios de transportistas, y se sumaron comerciantes, estudiantes, maestros y el colectivo LGTBI, que denunció que las prostitutas transexuales son especialmente vulnerables a este delito.
"El motivo de la marcha es por la vida, porque todos los chóferes son extorsionados y a las empresas de (el distrito limeño de)San Juan de Lurigancho de igual manera les piden un dinero que nadie puede pagar (...) Se le pide al Congreso que por favor tome cartas en el asunto porque el pueblo ya no puede más, ya no podemos más", dijo a EFE en la protesta el presidente de la Asociación de transportistas del Cono Oeste, Horacio Rabanal.
Coincidió el también transportista Ignacio Osorio, al asegurar que su distrito y el país en general está viviendo un momento muy difícil, y que delincuentes piden de forma diaria pagos de dinero que ya no pueden asumir.
"El Gobierno, el Legislativo y el Poder Judicial y los policías deben unificarse y deben tener un líder. Aquí no hay liderazgo en este Gobierno. La señora Dina Boluarte nos acusa que somos informales, así seamos informales (...) Aquí todos estamos por seguridad de la vida", agregó Osorio, al mostrar preocupación por asesinatos a compañeros transportistas a los que extorsionan bandas.
Además de los reclamos sobre esta materia, los manifestantes también expresaron su malestar con el Gobierno, especialmente con el ministro del Interior, Juan José Santiváñez y el Congreso.
"Que se vayan todos", "Los delincuentes están en el Congreso", "Dina y el Congreso, la misma porquería", "Que viva la lucha del pueblo organizado", "Esta lucha es justa y nada nos asusta" y "La indiferencia mata más que las balas", fueron algunos de los gritos que se escucharon.
En una conferencia de prensa posterior al Consejo de Ministros, el presidente del gabinete, Gustavo Adrianzén, felicitó a los manifestantes por la conducta cívica y actitud pacífica mostrada durante la jornada.
En el total de las zonas donde hubo movilizaciones, el 98 % fueron "de manera pacífica" y apuntó que "esto dice que los peruanos aprendimos las lecciones".
"Tenemos un estricto respeto a la protesta", reiteró.
También felicitó a los 13.000 policías y 4.000 miembros de las Fuerzas Armadas desplegados para preservar el orden y que "garantizaron la seguridad".EFE
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