Las autoridades rusas han defendido este miércoles que su cooperación militar con Corea del Norte respeta el Derecho Internacional, unas declaraciones que llegan poco después de que el Gobierno estadounidense confirmara por primera vez el envío de militares norcoreanos a Rusia para su previsible participación en la invasión de Ucrania.
La portavoz del Ministerio de Exteriores, Maria Zajarova, ha indicado durante una rueda de prensa que esta cooperación "ya sea en el campo militar o en otras áreas", respeta las normativas internacionales y "no viola ni causa daño alguno a Corea del Sur", según han recogido medios rusos.
En este sentido, ha asegurado que las informaciones sobre el envío de tropas a Rusia por parte de Pyongyang son un "bulo" con el que solo se busca "formar alboroto" y ha denunciado que estas informaciones aparecieron en primer lugar en medios de comunicación ucranianos.
Según Zajarova, este asunto también estaría relacionado con el hecho de que el Gobierno de Ucrania lleva dos años pidiendo a Corea del Sur el envío de armas al territorio, por lo que ahora Kiev estaría tratando de ejercer presión sobre Seúl respecto a este asunto. "Creemos que las autoridades surcoreanas no deberían dejarse llevar por el régimen de Kiev", ha subrayado.
Sin embargo, este mismo miércoles la Inteligencia de Corea del Sur ha situado en unos 3.000 los efectivos enviados por Corea del Norte a Rusia para su posterior despliegue en Ucrania, una cifra que giraría en total en torno a los 12.000 soldados, a los que Pyongyang pagaría unos 2.000 dólares (unos 1.850 euros) al mes por prestar sus servicios.
Asimismo, las fuerzas rusas estarían "reclutando en masa" traductores intérpretes de coreano y ruso. Sin embargo, la Inteligencia de Corea del Sur ha obtenido datos que apuntarían a que estos militares, con una gran preparación física y mental, carecerían de conocimientos sobre la guerra moderna, por lo que aún no pueden ser desplegados en el campo de batalla.