Jorge Fuentelsaz
Madrid, 23 oct (EFE).- El arabista Ignacio Gutiérrrez de Terán, autor del libro 'Hezbolá. El laberinto de Oriente Medio', considera que el conflicto armado entre Israel y el grupo libanés Hizbulá (respaldado por Teherán), dependerá de la anunciada represalia israelí contra Irán.
La evolución del conflicto armado en el Líbano "va a depender mucho de la tan anunciada y prolongada respuesta israelí al último ataque iraní (contra Israel) de septiembre. Creo que ahí tenemos la clave", asegura Gutiérrez de Terán, que acaba de publicar este título con la editorial Los Libros de la Catarata.
El arabista espera una respuesta militar israelí "más contenida y menos feroz de lo que se anunciaba en algunos momentos y, a partir de ahí, podremos ver qué ocurre en función de cómo se desarrolla el conflicto bilateral entre Irán e Israel".
Asimismo, sostiene que también será clave la nueva Administración estadounidense que salga de las urnas del próximo 5 de noviembre y su disposición o no a "forzar alguna salida negociada".
Pero, ocurra lo que ocurra, vaticina un conflicto duradero en el que Hizbulá todavía no ha jugado todas sus cartas sobre el terreno en el enfrentamiento cuerpo a cuerpo con las tropas israelíes.
"Probablemente, Israel se verá abocada a una guerra de meses en los que tendrá que afrontar numerosas bajas diarias en el frente de combate", sostiene.
El libro intenta arrojar luz sobre el origen de este grupo chií, que desata pasiones encontradas entre detractores y simpatizantes y militantes, tanto dentro como fuera del Líbano, y explicar su desarrollo doctrinal e ideológico, su evolución política, su encaje en la arena libanesa y su confrontamiento militar con Israel.
El profesor sostiene que cuando Hizbulá comenzó a disparar cohetes contra Israel el 8 de octubre de 2023 en solidaridad con el grupo palestino Hamás, que un día antes había lanzado un ataque en territorio Israelí que causó unos 1.200 muertos y 250 secuestrados, su intención no era buscar un enfrentamiento directo, sino mantener un "conflicto de baja intensidad" hasta que cesara la ofensiva israelí.
"La situación económica en Líbano es desastrosa y hay un gran rechazo en todos los ámbitos sociales a una intervención directa en un conflicto que muchos libaneses piensan que va a ser muy negativo para el país", dice.
Incluso, los detractores del grupo -agrega- calificaban esos disparos a Israel de "comedia para salvar el expediente".
Sin embargo, continúa, "a partir del verano de 2024 vemos una escala de tensión provocada, en primer lugar, por Israel. E Israel va más allá de las líneas clásicas de confrontación que estaban establecidas de una forma oficiosa desde 2006 y comienza a atacar a dirigentes militares y políticos", hasta que la situación se desborda y comienza la ofensiva terrestre israelí.
Para Gutiérrez de Terán responder a la pregunta ¿qué es Hizbulá?, es muy complicado y depende del posicionamiento político y objetivos de quien responda.
"(Desde el punto de vista occidental, casi todas las denominaciones son negativas: desde 'el partido terrorista' al 'actor que cumple estrictamente las órdenes de Irán'", comenta.
A este respecto, asegura que "el antiguo secretario general Hasan Nasrala, que ha sido asesinado en septiembre, no ha ocultado nunca que ellos tienen una relación orgánica y vital con Irán, que buena parte de su presupuesto, sobre todo el destinado al aparato militar, procede directamente de Teherán".
Si bien Hizbulá acepta la autoridad moral y doctrinal de Irán, dice, "lo difícil, muchas veces, es establecer hasta qué punto Hizbulá sigue las pautas de Irán en el ámbito regional y su ámbito de autonomía dentro del Líbano, que probablemente sea mucho mayor del que suponemos".
Dentro del Líbano, por otra parte, depende si la pregunta se hace a sus partidarios o a sus detractores.
Los primeros lo ven como un grupo de resistencia contra un proyecto sionista expansionista que ofrece unos servicios sociales que el débil estado libanés es incapaz de ofrecer, mientras que sus detractores consideran que el grupo explota su enfrentamiento con Israel "como excusa para mantener su influencia política y, sobre todo, militar".
Además, cuenta Gutiérrez de Terán, su nacimiento está vinculado tanto a Israel, ya que el propio grupo ha reconocido que sin las agresiones israelíes contra el Líbano de 1978 y 1982 no hubiera surgido, al menos tal y como es hoy, como a la "desaparición del Estado libanés como entidad capaz de aportar estos servicios a la población" y de erigirse como el único garante de la seguridad dentro y fuera del país. EFE
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