Bruselas, 23 oct (EFE).- La croata Duvranca Suica, candidata a asumir la cartera del Mediterráneo en la nueva Comisión Europea, trasladó al Parlamento Europeo su intención de liderar la preparación de un nuevo pacto para la región mediterránea y una nueva estrategia para Oriente Medio, con vistas al día después de la guerra en Gaza.
Así consta en un cuestionario escrito hecho público este miércoles en el que ha respondido a las diferentes comisiones parlamentarias relacionadas con su cartera como paso previo a la comparecencia en la que tendrá que defender en persona su candidatura, el 5 de noviembre.
En estrecha colaboración con la próxima jefa de la diplomacia europea, Kaja Kallas, Suica dice que tratará de dar una "respuesta unificada" de la UE a los "complejos desafíos" de la región mediterránea, incluidos Oriente Medio, el norte de África y los Estados del Golfo.
"Una coordinación estrecha y eficaz entre las propuestas políticas y su aplicación, respaldada por esfuerzos diplomáticos, será crucial para fortalecer la voz y el papel de la UE en la región", afirma.
"Plenamente consciente de la gran responsabilidad" que supone asumir una cartera de "importancia estratégica", ya que conlleva "replantear la relación entre la UE y los países vecinos del sur en un momento especialmente difícil", Suica se compromete a aprovechar toda la gama de políticas e instrumentos comunitarios para "ayudar a llevar estabilidad, paz y prosperidad a la región".
"Debemos fomentar nuestra asociación y elevar aún más la reputación y la credibilidad de la UE como socio fiable y esencial", agrega.
Según la política croata, ese nuevo pacto que promueve presenta "una triple oportunidad": "En primer lugar, subrayar que la UE considera sus relaciones con y en la región como una prioridad política; en segundo lugar, reconstruir la confianza a través de un amplio diálogo y consulta; en tercer lugar, elaborar una agenda audaz y centrada en prioridades acordadas y concretas en áreas de beneficio mutuo".
El nuevo pacto debería basarse, en su opinión, en la Agenda para el Mediterráneo existente y centrarse en áreas de interés mutuo, como las inversiones, el comercio, la estabilidad económica, la creación de empleo, la conectividad, la energía, el transporte, la alimentación, la seguridad y la migración, así como la educación y la ciencia.
Mencionó como ejemplos las nuevas asociaciones estratégicas y globales desarrolladas con Túnez y Egipto, concluidas en julio de 2023 y junio de 2024, respectivamente.
Apoyó "una auténtica asociación basada en un enfoque pragmático y centrado en los intereses mutuos", que ayude a la UE "a convertirse en un socio aún más eficaz en la promoción de la estabilidad, la prosperidad y la resolución de conflictos en la región".
Suica promete que trabajará "en el desarrollo de una nueva estrategia para Oriente Próximo, con vistas al día después de la guerra en Gaza, centrada en promover todos los pasos necesarios para una solución de dos Estados y fortalecer las asociaciones con los principales interesados regionales".
Eso incluiría un programa para acompañar a la Autoridad Palestina en las reformas necesarias y el proceso de modernización, así como iniciativas para apoyar la recuperación y la reconstrucción de Gaza una vez que la situación lo permita.
Suica también se compromete a reforzar la cooperación de la UE con el Líbano y asegurar que se atiendan las necesidades inmediatas, en plena coordinación con Kallas y con la futura comisaria de Gestión de Crisis, la belga Hadja Lahbib.
El reto es intensificar esfuerzos para apoyar a los refugiados en toda la región, incluso en lo que respecta al retorno voluntario, dice Suica, cuya misión se extiende también a los países del Golfo Pérsico.
"Es esencial el compromiso con los países del Golfo. La UE y esta región tienen mucho que ganar, en términos de oportunidades económicas y objetivos de seguridad, de una asociación más fuerte y más estratégica", asegura.
Por eso, Suica impulsará una iniciativa para fortalecer la cooperación regional y bilateral, incluida la búsqueda de acuerdos de asociación estratégica con cada uno de los seis países del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) y se asegurará de que esa región y la UE aúnen sus fuerzas para la reconstrucción de Gaza y las iniciativas de inversión en la región mediterránea. EFE