Las autoridades de Filipinas han informado este miércoles de que al menos siete personas han muerto y más de 30.000 han tenido que ser evacuadas ante el paso de la tormenta tropical 'Kristine', también llamada 'Trami', por el norte del país, especialmente en la isla de Luzón.
Las lluvias torrenciales provocadas por la tormenta han causado el desbordamiento de varios ríos y han sumergido pueblos enteros, que han quedado completamente anegados. Así, decenas vehículos han sufrido daños por el desprendimiento de sedimentos volcánicos, tal y como han recogido varios medios locales.
Se estima que 32.000 personas han tenido que abandonar sus hogares en el norte de Filipinas a medida que la tormenta se ceba con la isla de Luzón, donde han saltado todas las alarmas. En la región de Bicol, a unos 400 kilómetros al sureste de la capital, Manila, las inundaciones complican las labores de rescate.
El ojo de 'Kristine' se encuentra este miércoles a unos 160 kilómetros de la provincia de Aurora, en Luzón, con vientos máximos sostenidos de 85 kilómetros por hora, según informaciones de la agencia meteorológica, que apunta a que podría llegar a la costa nororiental del país sobre las 23.00 de la noche (hora local).