Las autoridades de Kenia han confirmado este lunes que han expulsado "a petición del Gobierno de Turquía" a cuatro refugiados turcos que residían en el país africano y que fueron secuestrados el viernes pasado por hombres armados en la capital keniana, Nairobi.
El secretario principal del Ministerio de Exteriores keniano, Korir Singoei, ha dicho que fueron repatriados a su país de origen durante la jornada del viernes, puesto que "ha recibido garantías de las autoridades turcas de que los cuatro serán tratados con dignidad de conformidad con el Derecho Internacional".
"Kenia accedió a esta solicitud en virtud de las sólidas relaciones históricas y estratégicas basadas en instrumentos bilaterales entre nuestros respectivos países. (...) Kenia asegura a la comunidad internacional su compromiso inquebrantable con la protección y promoción de los derechos de los refugiados", según reza un comunicado.
Según ha informado la cadena de televisión BBC, que se ha puesto en contacto con uno de los secuestrados que tiene nacionalidad británica, se cree que los repatriados son seguidores de la organización Gulen, cuyo líder, el clérigo turco Fetulá Gulen que estaba acusado por las autoridades turcas de estar detrás del intento de golpe de Estado de 2016, falleció en la víspera a los 83 años en Estados Unidos, en donde residía desde 1999 a raíz de un exilio autoimpuesto por sus diferencias con las autoridades.
El Grupo de Trabajo sobre Reformas Policiales de Kenia, de la cual forma parte Amnistía Internacional, se ha mostrado "consternado por la admisión del Gobierno" de que las fuerzas de seguridad del país han participado en el retorno forzado de los cuatro refugiados,
"El principio de no devolución es una piedra angular de la protección de los refugiados. Está reconocido en el Derecho Internacional Humanitario desde hace más de setenta años (...) Estas obligaciones no pueden negociarse en aras de intereses comerciales, diplomáticos o comerciales sin violar tanto el derecho nacional como el internacional", han manifestado.
La Asociación Internacional para la Defensa de los Derechos Humanos en Ginebra (IAHRA Ginebra) ha denunciado que la repatriación de los refugiados "es inaceptable" y "un flagrante desprecio de las obligaciones en materia de Derechos Humanos", mientras que ha cuestionado que Kenia haya sido elegida para el Consejo de DDHH de la ONU, "¿así es como se empieza? ¿secuestro y entrega de cuatro refugiados a Turquía?".