Iberdrola ha cerrado este martes la adquisición del 88% de la eléctrica inglesa Electricity North West (ENW), con un valor total de la compañía -el 100% de la empresa incluyendo deuda-, que asciende aproximadamente a 5.000 millones de euros, convirtiéndose en el segundo operador de redes eléctricas en Reino Unido, informó la energética.
A partir de ahora, Iberdrola distribuirá electricidad a unos 12 millones de personas y contará con más de 170.000 kilómetros de redes. Además, dará empleo a más de 8.500 personas en todo el país.
Iberdrola y un consorcio de inversores japoneses liderado por Kansai -que mantendrá el 12% del capital de ENW- han firmado un acuerdo de accionistas para colaborar a largo plazo. La transacción está sujeta a la revisión de la autoridad de la competencia y los mercados de Reino Unido (CMA), según la normativa aplicable a este tipo de transacciones.
Con esta operación, Reino Unido se convierte en el primer país de la compañía por base de activos de redes, con unos 14.000 millones de euros, seguido de Estados Unidos con 13.300 millones de euros a cierre del primer semestre de 2024.
Además, el grupo presidido por Ignacio Sánchez Galán señaló que esta adquisición se enmarca dentro de su estrategia de "potenciar el negocio de redes en países con sólido rating, como la calificación crediticia de 'AA' de Reino Unido".
La adquisición de ENW supone una oportunidad única para Iberdrola, al tratarse de la compañía que se sitúa entre las dos empresas de distribución de Scottish Power en Escocia y en Merseyside y Gales.
ENW distribuye electricidad a casi cinco millones de clientes en la zona noroeste de Inglaterra, en ciudades como Manchester, Lancaster y Barrow, y cuenta con 60.000 kilómetros de redes de distribución de electricidad.
APUESTA ESTRATÉGICA POR REINO UNIDO CON 28.000 MILLONES DE INVERSIÓN.
Desde la compra de Scottish Power en 2007, Reino Unido ha sido uno de los destinos de la inversión del grupo. Además, la semana pasada el presidente de la compañía, Ignacio Sánchez Galán, anunció planes para duplicar la inversión en el país, hasta superar los 28.000 millones de euros (24.000 millones de libras) en 2028.
Además, Iberdrola es la única 'utility' del país que genera el 100% de la energía libre de emisiones. Dos tercios de la inversión prevista por la compañía se dirigirán a las redes de distribución y transmisión. La exigencia de inversión en estas últimas aumentará debido a las mejoras requeridas en el país bajo el marco regulatorio de 2026 a 2031, conocido como RIIO-T3, que se aprobará el próximo año. Las inversiones incluirán, por ejemplo, la nueva interconexión submarina Eastern Green Link 1.
A través de Scottish Power, Iberdrola es uno de los mayores inversores en energías renovables en el país, y es dueña y opera la red de transporte del sur de Escocia y las redes de distribución en el centro-sur de Escocia y Merseyside, el norte de Gales y Cheshire.
En la actualidad, el grupo cuenta en el país con más de 111.400 kilómetros de líneas eléctricas instaladas y 40 parques eólicos terrestres y 2 marinos en funcionamiento, con una capacidad renovable de 3.000 MW que abastece el equivalente a más de dos millones de hogares. Esto le permite generar el 100% de la energía libre de emisiones.
Dentro de sus planes de crecimiento, la energética pondrá en marcha el parque eólico marino East Anglia 3, que se encuentra en construcción, y el East Anglia 2, recientemente adjudicado y que requerirá una inversión de unos 4.000 millones de libras (unos 4.800 millones de euros).