El secretario general de la ONU, António Guterres, ha condenado este lunes el bombardeo israelí perpetrado este fin de semana en la ciudad gazatí de Beit Lahiya, en el norte de la Franja, que se saldó con más de 73 muertos, según el balance proporcionado por las autoridades del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
"(Guterres) condena inequívocamente la continua y generalizada pérdida de vidas en Gaza, incluidos los ataques aéreos israelíes en Beit Lahiya, que mataron a decenas de palestinos, entre ellos muchas mujeres y niños. Los civiles deben ser respetados y protegidos en todo momento", ha declarado el portavoz adjunto del secretario general, Farhan Haq, en una rueda de prensa.
Asimismo, ha indicado que "sigue profundamente alarmado por el rápido deterioro de la situación de los civiles en el norte de Gaza, incluidos los desplazamientos masivos y la falta de elementos esenciales para la supervivencia". "Pide el acceso inmediato y sin trabas de los equipos humanitarios y de rescate para salvar vidas", ha agregado.
En este sentido, ha remarcado que los recientes ataques contra hospitales en el norte de Gaza están exacerbando una crisis humanitaria "ya grave" y poniendo "en peligro la vida de decenas de miles de personas". "Se debe proteger a los pacientes y al personal médico. Los hospitales no deben ser objeto de ataques. Se debe priorizar el acceso a la atención médica y los suministros médicos esenciales para evitar más pérdidas de vidas", ha señalado.
"Las violaciones del Derecho Internacional Humanitario que estamos presenciando en Gaza por todas las partes en este conflicto son inaceptables. Es esencial que se rindan cuentas por los crímenes internacionales cometidos por cualquiera de las partes", ha agregado el portavoz adjunto.