Óscar Maya Belchí
Madrid, 22 oct (EFE).- Con 0-2 al descanso ante el Borussia Dortmund y arreciando las dudas sobre el juego del Real Madrid. Carlo Ancelotti seguía sin dar con la tecla táctica para acomodar a sus futbolistas y su equipo se vio superado por el conjunto alemán en los primeros 45 minutos. Sin embargo, volvió a aparecer el factor Santiago Bernabéu en una noche europea para apaciguar los problemas a cuatro días del clásico.
Después de cuatro partidos, ‘Carletto’ volvió a apostar de inicio por el tridente llamado a ser titularisimo esta temporada, pero la falta de compenetración y las lesiones y molestias físicas hicieron que el plan cambiase.
Desde el 24 de septiembre no salía el Real Madrid de inicio con Vinícius-Mbappé y Rodrygo en ataque. En aquel partido contra el Alavés que empezó con un 3-0 y síntomas de entendimiento entre las estrellas ofensivas y que acabó con un 3-2 y pidiendo la hora en el Santiago Bernabéu.
Desde entonces, Ancelotti volvió a apostar por los cuatro centrocampistas que tan buen rédito le dio la pasada temporada, pero sin tanta suerte.
Contra el Atlético de Madrid (1-1), Mbappé fue baja por lesión y entró Modric; en Lille (1-0), en la primera derrota de la temporada, Vinícius y Endrick fueron los delanteros; y en la visita del Villarreal (2-0) y en Vigo contra el Celta (1-2) los elegidos de inicio fueron Mbappé y Vinícius.
Además, en este último partido, Ancelotti optó por la variante de colocar a Aurelien Tchouaméni como tercer central en algunas fases el juego; sin éxito en su idea.
Por ello, para recibir el Borussia Dortmund recuperó su plan inicial en ataque con el tridente y devolviendo la titularidad a Luka Modric en el centro del campo, quien fue clave contra el Celta de Vigo al salir desde el banquillo y dar la asistencia del 1-2 a Vinícius.
Sin embargo, el plan se cayó en la primera parte, ya que el Real Madrid no pudo hacerse con el control del juego. Posesión a favor del Dortmund (52%), dos errores defensivos de Lucas Vázquez, al perder el balón en la frontal del área en el 0-1 y sin prestar atención a su marca en el 0-2, y dos palos en la misma jugada encendieron las alarmas.
Sin embargo, el Real Madrid se agarró una fuerza única. La que convierte lo imposible en posible. A otra remontada con el factor Santiago Bernabéu.
Recuperó el conjunto blanco la mística de las remontadas para llevarse los tres puntos. Primero, igualó el partido con dos goles en dos minutos. Minuto 60 y 62. Primero con un cabezazo de Rüdiger y luego en un remate de Vinícius, ambos goles con Mbappé interviniendo antes de los tantos.
Partido igualado, pero aún quedaba más. Lucas Vázquez, verdugo en los dos goles del Dortmund, se redimió con el 3-2 en el minuto 83, uno después de que Courtois sacara un disparo de Brandt; en otra parada de las que salvan al Real Madrid.
Y ya con el 3-2 en el bolsillo, Vinícius se encargó de ponerle una marcha más a la locura. Cogió el balón en campo propio y condujo sin oposición, a alta velocidad, hasta la frontal del área para superar a Kobel con un gran disparo raso.
4-2 en el minuto 86, tres después del 3-2. Dos arreones y la confirmación de una remontada en botas de un Vinícius que se quitó la camiseta en la celebración como muestra de la euforia con la que el Real Madrid llegará al clásico del sábado tras unos segundos 45 minutos llevado en volandas por el factor Santiago Bernabéu, en otra remontada europea que cerró el propio 'Vini' con una gran jugada individual para firmar su primer triplete en la Liga de Campeones. EFE
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