La Justicia de Filipinas ha condenado a cadena perpetua a 17 milicianos del grupo terrorista filipino Abú Sayyaf por su implicación en el secuestro de 19 extranjeros y dos ciudadanos filipinos en el año 2000, cuando se encontraban en un resort situado en la isla de Sipadan, en Malasia.
Un tribunal de la ciudad de Taguig, en la isla de Luzón, ha condenado a los 17 acusados tras hallarlos culpables de 21 cargos de secuestro y detención ilegal con rescate, por lo que ha ordenado además que se indemnice a las víctimas con unos 300.000 pesos (unos 4.700 euros) en concepto de daños y perjuicios.
Los miembros del grupo terrorista secuestraron a los 21 turistas a punta de pistola en un centro de buceo de Sidapan en abril de 2000. Las víctimas fueron trasladadas posteriormente en barco a Talipao, Sulu, y mantenidas cautivas en Jolo mientras los milicianos exigían cuantiosos rescates a sus familiares y respectivos gobiernos, según informaciones del diario 'The Philippine Star'.
Los rehenes fueron liberados a lo largo de los siguientes meses tras el pago del rescate a los secuestradores. Entre los 17 acusados hay milicianos de "perfil alto" que ya figuraban en la lista de sanciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, como Hilarión del Rosario Santos, también conocido como Ahmed Islam Santos, y Redendo Caín Dellosa, entre otros.
Santos es el fundador y líder del Movimiento Rajah Sulaiman, mientras que Dellosa es uno de los cabecillas. El Consejo de Seguridad de la ONU ha denunciado que varios de ellos tenían vínculos con Al Qaeda o los talibán y habían participado en la financiación, planificación o comisión de actos por parte de Abú Sayyaf y otros grupos.