MSF suspende sus actividades en una ciudad de Burkina Faso que sufre ataques yihadistas

Médicos Sin Fronteras suspende su labor en Djibo, Burkina Faso, por reiterados ataques armados que afectan la seguridad y el acceso a la asistencia médica en la región

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Uagadugú, 21 oct (EFE).- Médicos Sin Fronteras (MSF) informó este lunes de que ha suspendido temporalmente sus actividades humanitarias en Djibo, ciudad del norte de Burkina Faso que sufre atentados yihadistas, debido a los "continuos desafíos de seguridad".

En noviembre de 2023 y en julio de 2024, "las oficinas de MSF, las instalaciones médicas apoyadas por el Ministerio de Salud y los sitios de distribución de agua fueron repetidamente blanco de disparos", afirmó MSF en un comunicado, sin atribuir esos ataques a ningún grupo armado.

"Trágicamente, un niño murió tras ser alcanzado por una bala cerca de un punto de distribución de agua en septiembre de 2023", recordó.

"Cuatro edificios aún presentan agujeros de bala visibles, se han incendiado instalaciones médicas, se han vandalizado puntos de distribución de agua y nuestra capacidad para abastecer la zona por carretera se ha visto gravemente restringida", dijo la ONG, al enfatizar que estos ataques ponen "en grave riesgo la asistencia médica vital".

En Burkina Faso, añadió, las comunidades locales son "las principales víctimas de la inseguridad y la violencia", pues están "atrapadas en el fuego cruzado".

Al menos cuarenta personas murieron el pasado 26 de noviembre en un ataque de la organización yihadista Grupo por el Apoyo del Islam y de los Musulmanes (JNIM) a una base militar, viviendas y campamentos de desplazados internos en Djibo, según la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (ACNUDH).

Desde 2015, varios grupos yihadistas, ligados tanto a Al Qaeda como al Estado Islámico, se han establecido en Burkina Faso, donde controlan muchas zonas y atacan constantemente a la población.

Miles de personas han muerto en numerosos ataques y más de dos millones se han visto obligados a abandonar sus hogares.

El país encajó dos golpes de Estado en 2022: uno el 24 de enero, dirigido por el teniente coronel Paul-Henri Sandaogo Damiba, y otro el 30 de septiembre, encabezado por el capitán Ibrahim Traoré, quien dirige actualmente la nación.

Ambos golpes se perpetraron tras el descontento entre la población y el Ejército por los ataques yihadistas. EFE

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