Los Gobiernos de Estados Unidos, Japón y Corea del Sur han instado este viernes a Corea del Norte a respetar los Derechos Humanos en el país, requisito "fundamental" para lograr una paz "duradera" en la región, y se han comprometido a promover su desarrollo para un mayor bienestar de la población norcoreana.
"Hoy, mientras la situación de los Derechos Humanos en Corea del Norte continúa deteriorándose, los Gobiernos de Estados Unidos, la República de Corea y Japón instan a la comunidad internacional a cambiar su enfoque sobre las cuestiones de Derechos Humanos en Corea del Norte hacia la acción, desde la vigilancia de las violaciones y los abusos hasta la promoción de la rendición de cuentas", recoge en una declaración conjunta sobre el fortalecimiento de la cooperación para mejorar la situación de los Derechos Humanos en el país.
Los tres firmantes coinciden en señalar que el régimen norcoreano es a día de hoy "uno de los peores violadores de Derechos Humanos del mundo", denunciando los abusos que sus autoridades cometen "dentro de su propio territorio y en el extranjero", incluidos "ejecuciones sumarias, asesinatos, secuestros (...), torturas y detenciones ilegales e injustas".
Así las cosas, EEUU, Corea del Sur y Japón se han unido a fin de "intensificar (sus) esfuerzos conjuntos" para "promover la rendición de cuentas de los responsables de (estos) abusos (...), aumentar la conciencia mundial sobre las violaciones en Corea del Norte, e instar a la solución inmediata de los problemas de (...) las personas injustamente detenidas", entre otras cuestiones.
Asimismo, han acordado aunar fuerzas "para contrarrestar los riesgos generalizados que plantea el uso de trabajo forzoso" aplicado dentro y fuera de sus fronteras, así como "aumentar el acceso a la información independiente", todo ello en reconocimiento y apoyo a "la visión del presidente (surcoreano) Yoon de una península coreana libre, pacífica y próspera".
"En el espíritu de Camp David, los tres gobiernos estamos alineados en nuestra visión; nos mantenemos firmes ante los mayores desafíos de nuestra era; y estamos unidos en nuestro compromiso de abordar juntos los desafíos de los derechos humanos en Corea del Norte, ahora y en el futuro", concluye el comunicado.