Alonso Ruizpalacios retrata experiencias migrantes y el capitalismo deshumanizante en 'La cocina'

La película 'La cocina' de Alonso Ruizpalacios explora el racismo y las condiciones laborales de migrantes indocumentados en un restaurante de Manhattan, destacando el impacto del capitalismo en sus vidas

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El cineasta mexicano Alonso Ruizpalacios retrata experiencias migrantes, el racismo y el capitalismo más deshumanizante en 'La cocina', su cuarta película que se estrena en España en el marco de la Sección Oficial a concurso en la 69 Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci).

La película está basada en la obra de teatro de Arnold Wesker que el mismo director mexicano pudo ver en directo en Londres en su etapa de estudiante, cuando también trabajaba en la cocina de un restaurante "no muy Michelin", como ha relatado en la rueda de prensa posterior a la proyección del filme.

Ruizpalacios se enamoró de esta historia hace ya 15 años y es ahora cuando la ha adaptado para presentar al público lo que se cuece en la cocina de un famoso restaurante ubicado en el corazón de Manhattan cuyo personal está formado en su mayoría por migrantes indocumentados.

Los personajes principales, en este caso, son Julia (Rooney Mara), una camarera americana, y Pedro (Raúl Briones), cocinero mexicano y soñador. Ambos mantienen una relación informal que les llevará a vivir una situación traumática y a explotar, cada uno a su manera.

En el contexto de su lugar de trabajo, se presentan migrantes que llegan en busca del sueño americano, estadounidenses de origen migrante con racismo arraigado y jefes que imponen la productividad al trato humano, todo ello en blanco y negro, con provocadores movimientos de cámara, juego de reflejos, un ritmo frenético indispensable en ciertos puntos de la historia y planos detalles que atrapan al espectador.

"Quería retratar experiencias de mexicanos afuera", ha aseverado el cocinero de este filme sobre uno de los ingredientes principales, el reflejo de vivencias de migrantes, para lo que también ha recurrido a personajes de otras culturas con el objetivo de plasmar la "humanidad común" entre ellas.

No obstante, también ha dibujado en la cinta el racismo arraigado en cualquiera, por lo que ha decidido no presentar a los "blancos" como "malos" y a los "no blancos" como "tan buenos". "El racismo no tiene raza, si bien es cierto que evidentemente hay unas razas que lo ejercen mas hacia otras históricamente opresoras, pero creo que hay algo más complejo", ha advertido.

En este sentido, ha señalado al "capitalismo" y a quienes "controlan los medios de producción" que están "construyendo un mundo" donde "la productividad es el valor absoluto, por encima de las razones humanas y por encima de los sueños", ha lamentado.

Precisamente, una cocina es un es un espacio adecuado para abordar estas cuestiones, ya que se trata de un lugar "muy jerárquico", tal y como ha señalado Ruizpalacios, quien ha extrapolado el funcionamiento de una cocina al de "otras industrias", como el "cine".

"Comparten con la cocina una militarización en su organización", ha especificado el cineasta, quien ha detallado sobre el proceso de creación que fue muy importante las entrevistas que tuvo con trabajadores de cocinas reales en Nueva York, de los que escuchó historias "impactantes, dolorosas o divertidas".

CONTRASTES

En relación con los aspectos visuales, Ruizpalacios ha subrayado que ha optado por el blanco y negro, un "suicidio comercial", por la fuerza de los contrastes, adecuados para "hablar de los contrastes sociales y económicos".

Asimismo, el cineasta quería "borrar la temporalidad" de esta historia, de manera que se enmarque "en una especie de fábula", lo que "permite ir más allá del realismo". Solo dos momentos presentan planos con color, un azul que ilumina el espacio seguro de Julia y un verde que abduce a Pedro.

La cinta de Ruizpalacios compite por la Espiga de Oro en la Sección Oficial de la 69 Seminci, que presenta así su primer y único filme dirigido por un latinomericano.

ALONSO RUIZPALACIOS

Ruizpalacios (Ciudad de México, 1978) es director y guionista de teatro y cine, estudió en la Royal Academy of Dramatic Arts (RADA) de Londres y trabaja en su país natal con su compan*i*a de teatro Todas Las Fiestas de Mañana.

Su primer largometraje, 'Güeros' (2014), logró galardones como el de Mejor ópera prima en Berlín, los premios Horizontes y del Público en San Sebastián, y cinco premios Ariel de la Academia Mexicana.

Además, su segundo largo, 'Museo' (2018) ganó el Oso de Plata al mejor guion en la Berlinale y los premios al mejor director en Atenas y Morelia, además de estrenarse en Valladolid dentro de la sección Punto de Encuentro. En 2021 dirigió 'Una película de policías', que se alzó con el Oso de Plata a la mejor contribución artística en Berlín y seis premios Ariel.

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