"Para conocer una sociedad debes leer novelas sobre ella", dice el escritor Livaneli

Zülfü Livaneli destaca la importancia de la literatura para entender sociedades, a través de su obra 'A lomos del tigre', que aborda la figura del sultán Abdulhamit II y sus implicaciones políticas

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Ilya U. Topper

Estambul, 18 oct (EFE).- Para conocer en profundidad una sociedad ajena no basta con leer prensa ni ir al país como turista: hay que leer novelas, opina el escritor, músico y cineasta turco Zülfü Livaneli, en una entrevista con EFE en Estambul.

"El rol de la literatura es explicar quiénes son los demás. El periodismo puede dar información, el turismo da impresiones, pero para profundizar en el alma de una sociedad debes leer novelas sobre ella", dice el autor.

Livaneli, nacido en Anatolia central en 1946, es un artista político incluso cuando no lo pretende, dice a EFE durante el II Encuentro de Escritores Iberoamericanos, celebrado esta semana en Estambul y organizado por el Instituto Cervantes y la Embajada española.

Su último libro, 'A lomos del tigre', recién traducido al español, describe los años finales del último sultán otomano con poder político, Abdulhamit II, que fue depuesto y confinado en Salónica por una rebelión en 1909.

"Yo solo quería escribir sobre los últimos días de un dictador, algo tipo 'El otoño del patriarca' (de Gabriel García Márquez), pero aquí, el libro se asumió como una novela política, porque hay un encendido debate entre el Gobierno y el sector progresista, entre religiosos y laicos", señala el autor.

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan y el sector más religioso del país, nostálgico de la época otomana, "quieren convertir a Abdulhamit en un santo, mientras que el otro bando lo denigra como el 'sultán rojo', un dirigente cruel", resume el escritor.

Pero Livaneli no es ajeno a los debates políticos, a los que ha dedicado gran parte de su vida.

De hecho, su novela 'Serenata para Nadia' publicada en España el año pasado, tiene una clara vocación de esclarecer el pasado.

La obra recuerda y describe la tragedia del Struma, un barco con casi 800 refugiados judíos a bordo que fue hundido en 1942 en el Mar Negro tras permanecer 71 días fondeado ante la costa de Estambul, sin que Turquía, presionado por Reino Unido, permitiera el desembarco.

"La publicación de la novela (en 2011) demuestra el efecto de la literatura: ahora, el Gobierno turco conmemora la tragedia cada año con el rabinato", señala Livaneli.

También en su faceta de compositor, Livaneli busca acercar sociedades enfrentadas, especialmente mediante su larga amistad con el compositor griego Mikis Theodorakis (1925-2021).

"Cuando empezamos en los años 70 no había conexión (entre griegos y turcos), pero la gente empezó a cantar mis melodías en griego y las de Mikis en turco, y ahí entendieron que el otro bando también son seres humanos. Hicimos conciertos como el del antiguo teatro de Éfeso, con 30.000 personas cantando juntos...", recuerda el artista.

 También destaca su ya larga colaboración con Joan Baez, o con la española María del Mar Bonet en su álbum Salmaia (1995), así como los conciertos con la cantante griega Maria Farantouri, con quien actuó en el Odeón de la Acrópolis el año pasado.

El desmoronamiento del Imperio otomano a inicios del siglo XX dio paso a la época de los estados-nación, "con mucha crueldad, rebeliones, opresiones y guerras sangrientas", recuerda el escritor.

No solo las masacres de armenios en 1915 fueron parte de ese conflicto de pasar de un sistema imperial a uno de naciones, sino también el conflicto kurdo, si bien los kurdos "fueron los últimos en llegar" a la carrera por el estado-nación, apunta.

Las acciones armadas de la guerrilla kurda del PKK desde 1984 no solo han dejado un balance de 50.000 muertos, sino que han dificultado también la lucha cívica por los derechos kurdos emprendida por escritores como Yasar Kemal (1923-2015) o el propio Livaneli.

"El Gobierno siempre nos acusa de ser terroristas cuando defendemos los derechos de los kurdos", critica el escritor, pero cree que se está llegando a una solución mediante "algún tipo de autonomía".EFE

(foto)

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