Washington, 17 oct (EFE).- Estados Unidos bombardeó este jueves instalaciones subterráneas de los chiíes hutíes en Yemen, el último de una serie de ataques del Ejército estadounidense contra el movimiento respaldado por Irán.
Según un comunicado del Pentágono divulgado la noche del miércoles en el país norteamericano, la madrugada del jueves en Yemen, "hoy, las fuerzas militares de EE.UU., incluyendo dos bombarderos B-2, llevaron a cabo ataques precisos contra cinco almacenes subterráneos de armas en áreas controladas por los hutíes en Yemen".
"Las instalaciones albergaban armas de varios tipos que los hutíes han utilizado contra barcos civiles y militares a lo largo de la región", señala el comunicado, en nombre del secretario de Defensa, Lloyd Austin.
EE.UU. ya había atacado objetivos hutíes a comienzos de octubre, señalando que lo hizo para proteger la libertad de navegación y para reforzar la seguridad en aguas internacionales.
Desde noviembre del año pasado los hutíes atacan con misiles y drones buques israelíes o vinculados con Israel en los mares Rojo y Arábigo, en defensa de los palestinos y para dañar económicamente a Israel. También lanzan misiles contra el Estado judío, en su gran mayoría interceptados por las defensas israelíes.
La aviación israelí ha bombardeado en dos ocasiones el puerto yemení de Al Hodeida, utilizado por los hutíes, la última a finales del pasado septiembre, lo que provocó, según los hutíes, la muerte de cinco personas.
Miembros de la rama chií del islam, liderada por Irán, los hutíes controlan amplias regiones del centro, norte y el oeste del Yemen desde que se alzaran en armas en 2014 contra el gobierno yemení reconocido internacionalmente.
Sus ataques, que cuentan con el respaldo de Irán, han impactado gravemente en el comercio internacional y obligado a las principales navieras a desviar sus rutas en vez de emplear el mar Rojo y el canal de Suez.
"Los ataques ilegales de los hutíes continúan interrumpiendo la libre circulación del comercio internacional, amenazan con que se produzca una catástrofe medioambiental y ponen en riesgo las vidas de civiles", añadió el Pentágono. EFE