Madrid, 16 oct (EFE).- El Real Madrid, con la vuelta de Campazzo una vez una cumplida su sanción, e inmerso en una crisis deportiva al sumar cinco derrotas y tres victorias en los ocho partidos oficiales de la temporada, se verá las caras este jueves en la Euroliga contra el Panathinaikos griego, actual campeón de la competición.
Precisamente el equipo griego es el rival que no permitió a los merengues hacerse con su duodécimo trofeo en la final de Berlín de la pasada campaña.
Con balances negativos (1-2) tanto en la competición europea como en la Liga Endesa, los de Chus Mateo enfrentan esta cuarta jornada de la Euroliga después de caer este martes ante el Baskonia (76-72) de Pablo Laso, exentrenador del club madrileño, en el Buesa, provocando el segundo tropiezo en tres jornadas, ambos fuera de casa, encontrándose en puestos de eliminación de la Euroliga al no estar entre los diez primeros.
A pesar de la gran actuación del pívot caboverdiano Edy Tavares, con 14 puntos y 15 rebotes, el Madrid no pudo llevarse la victoria acusando la ausencia por sanción del argentino Facundo Campazzo, que no pudo disputar el encuentro después de que el Juez de Apelación de la competición ratificara la sanción de un partido tras su expulsión en la derrota frente al Bayern, en la primera jornada.
El base del equipo blanco es la gran novedad del encuentro y será una de las piezas clave tras la reciente baja del dominicano Andres Feliz por una rotura de la fascia plantar del pie derecho en el partido de la segunda jornada frente al Partizán, única victoria de los blancos esta temporada en Europa.
Además, los madridistas mantienen la baja de Usman Garuba, que se ha perdido los últimos cuatro encuentros, dos de Liga Endesa y otros dos de Euroliga.
Chus Mateo, que remarcó la necesidad de que el equipo de un "paso adelante para empezar a sumar victorias", definió al club griego como un "equipo fuerte" y ensalzó sus cualidades.
"Ellos no te dan margen de error y castigan todas tus pérdidas con canastas al tener jugadores de calidad y es un partido que nos va a demandar el cien por cien", declaró el técnico en la previa del encuentro.
Por otro lado, el Panathinaikos viene de caer derrotado también este martes en la pista del París por 84-80, cortando la racha de cuatro partidos sin perder, dos de Euroliga y dos de la Liga Griega, donde sigue invicto.
Los españoles Lorenzo Brown, con 14 puntos frente al París, que se incorporó al equipo este verano, y Juancho Hernángomez, amenazan con acrecentar la crisis del Real Madrid.
Además, de la llegada de Brown, Omer Yurtseven (Utah Jazz) y Cesi Osman (Spurs) fueron los otros fichajes que potencian un plantel que ha mantenido a Kendrick Nunn, Matthias Lessort, Kostas Sloukas, que estarán liderados por el técnico Ergin Ataman.
A pesar de la reciente derrota frente al París, que fue la primera victoria del club francés en la historia de la Euroliga, los griegos se impusieron al Alba Berlín y al Bayern en la primera y segunda jornada de la competición, respectivamente. EFE