Hong Kong, 16 oct (EFE).- El jefe del Ejecutivo hongkonés, John Lee, ofreció este miércoles su tercer discurso político desde el inicio de su mandato de cinco años, en el que expuso un plan para abordar los desafíos económicos que enfrenta la ciudad y trató temas relacionados con la seguridad nacional.
Durante su intervención, Lee aludió a la resolución de la Tercera Sesión Plenaria del XX Comité Central del Partido Comunista Chino, expresando su deseo de aprovechar las "fortalezas institucionales" del modelo 'un país, dos sistemas'. Su objetivo es impulsar el estatus de Hong Kong como centro internacional de finanzas y colaborar en el desarrollo de la Gran Área de la Bahía, que incluye ciudades surorientales chinas como Shenzhen o Cantón.
"La seguridad y el desarrollo funcionan juntos como las dos alas de un pájaro", declaró Lee, comprometiéndose a "proteger la seguridad nacional" y a promover la educación patriótica y la cultura china.
Estas acciones buscan "garantizar la prosperidad y estabilidad", después de que Pekín impusiese una ley de seguridad en la excolonia en 2020 criticada por organizaciones de derechos humanos tras las multitudinarias protestas antigubernamentales que se produjeron un año antes.
Para fomentar el patriotismo, el Gobierno está desarrollando estrategias que incluyen "fortalecer la enseñanza de la historia y geografía" de China en las escuelas, aseveró el líder hongkonés.
Este discurso se presenta en un momento crítico, marcado por dificultades económicas y una notable debilidad en el consumo interno que ha afectado a diversas empresas en la ciudad.
Ante esta situación, Lee se comprometió a impulsar el crecimiento como uno de los principales objetivos de su agenda política, haciendo hincapié en la implementación de medidas de apoyo a las pymes, consideradas la columna vertebral del tejido productivo.
Con el fin de incentivar a empresas estratégicas a establecer sus sedes en Hong Kong, se presentará un proyecto de ley para introducir un mecanismo de redomiciliación, permitiendo que las compañías interesadas no tengan que liquidar sus operaciones en su país de origen.
En el ámbito del bienestar social, el Gobierno propuso nuevas leyes para regular el arrendamiento de "apartamentos subdivididos", donde residen aproximadamente 110.000 familias. Estas viviendas han sido criticadas por no cumplir con estándares aceptables.
Revitalizar el estatus de Hong Kong como centro financiero
A partir del miércoles, se implementarán mejoras en el Régimen de Entrada de Nuevas Inversiones de Capital, permitiendo la inversión en propiedades residenciales siempre que el precio de la transacción sea igual o superior a 50 millones de dólares hongkoneses (6,4 millones de dólares, 5,9 millones de euros), con un límite de 10 millones (1,2 millones de dólares, 1,1 millones de euros) para la inversión inmobiliaria, indicó Lee.
Además, se ampliará a cinco años el periodo de validez de los visados de entrada múltiple en China continental para el personal extranjero de empresas registradas en Hong Kong, incluyendo a los residentes no permanentes.
El Gobierno también anunció el lanzamiento de fondos cotizados (ETF) que seguirán los índices bursátiles de Hong Kong en los países del Golfo, con el objetivo de fortalecer la relación con los mercados de Oriente Medio y la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN).
Otra medida destacada es la reducción del impuesto sobre las bebidas alcohólicas premium, con el fin de promover el comercio de licores y fomentar el desarrollo de industrias de alto valor añadido, como la logística, el turismo y el consumo de alimentos y bebidas de alta gama.
Lee anunció además que a partir del miércoles los visitantes a Hong Kong ya no necesitarán completar formularios de entrada y salida, como parte de las medidas destinadas a atraer a turistas internacionales, especialmente de Oriente Medio.
El funcionario también propuso transformar el centro financiero de Hong Kong en un "epicentro internacional de talento", y enfatizó la necesidad de fortalecer el compromiso con el comercio global y profundizar la colaboración en la Gran Área de la Bahía.
Para abordar la escasez de mano de obra en ciertos oficios, se comprometió a establecer canales para atraer especialistas, agregó Lee.
Hong Kong se prepara además para convertirse en un centro internacional de comercio de oro, una iniciativa que busca aprovechar la posición de la ciudad como uno de los mayores mercados de su importación y exportación del mundo, con el objetivo de atraer inversores y fomentar el desarrollo económico. EFE