Caracas, 15 oct (EFE).- El Gobierno de Venezuela tildó este martes de "panfleto" el informe de la Misión Internacional Independiente de la Organización de Naciones Unidas (ONU), en el que se denuncian supuestos crímenes de lesa humanidad cometidos por las autoridades del país en los comicios del 28 de julio, en las que Nicolás Maduro fue proclamado presidente reelecto.
En un comunicado, la representación de Venezuela ante la ONU en Ginebra rechazó "enérgicamente el panfleto publicado por la vergonzosa misión", por ser "un documento novelesco" y "un guion fantasioso", sin responder a los señalamientos que contiene el informe.
"Esa misión mercenaria jamás ha pisado Venezuela. Sin embargo, ha derrochado más de seis millones de dólares en propaganda política en favor de la derecha fascista venezolana", señala el escrito.
Venezuela aseveró también que la misión usa una metodología y fuentes de información "ampliamente cuestionables por su falta de rigurosidad", pues toma "como ciertos relatos de redes sociales y medios palangristas de comunicación".
En un informe de 158 páginas que abarca el periodo comprendido entre el 1 de septiembre de 2023 y el 31 de agosto de 2024, la misión acusa a fuerzas de seguridad y grupos civiles armados progubernamentales de asesinatos, desapariciones forzadas, actos de tortura y violencia sexual y de género.
Las fuerzas de seguridad estuvieron "involucradas masivamente" en violaciones de derechos humanos, como detenciones arbitrarias, uso excesivo de la fuerza para reprimir protestas, o tratos crueles y degradantes, indica el documento, señalando como responsables a los servicios de inteligencia civil (SEBIN) y militar (DGCIM), así como a la Guardia Nacional Bolivariana y a la Policía Nacional.
También asegura que "las declaraciones de las máximas autoridades del Estado, sobre todo después del 28 de julio, incitaron a la represión y contribuyeron a generar un clima de hostilidad y violencia".
Una vez anunciado Maduro como ganador, la oposición mayoritaria denunció fraude y aseguró que su abanderado, Edmundo González Urrutia, ganó la Presidencia, un reclamo que cuenta con el respaldo de varios países. EFE