Pesquisa indagará en muerte por novichok de una británica tras envenenamiento de exespía

Investigación pública evaluará el fallecimiento de Dawn Sturgess por novichok en Amesbury, analizando su conexión con el envenenamiento del exespía Sergei Skripal y su hija en Salisbury

Guardar

Londres, 14 oct (EFE).- Una pesquisa pública que arrancó este lunes en Salisbury (Inglaterra) determinará si la británica Dawn Sturgess, fallecida en 2018 al entrar en contacto con el agente tóxico novichok, fue una víctima de un "enfrentamiento cruzado" en un "intento de asesinato internacional".

La investigación intentará esclarecer las circunstancias que rodearon el inesperado fallecimiento de Sturgess a los 44 años en la localidad de Amesbury el 8 de julio de 2018, al rociarse "inconscientemente" con un frasco de perfume encontrado por su pareja sin saber que éste contenía novichok, una sustancia altamente tóxica.

Ese componente químico se había empleado solo cuatro meses antes en la vecina localidad de Salisbury por miembros de los servicios de inteligencia de Rusia para envenenar a Sergei Skripal (exmiembro del Servicio de Inteligencia militar rusa -GRU-) y su hija Yulia, quienes sobrevivieron junto con otro agente de policía británico que también resultó afectado por el mismo componente.

En el caso de los Skripal, padre e hija entraron en contacto con la sustancia cuando los agresores impregnaron con la sustancia altamente tóxica que afecta al sistema nervioso el pomo de la puerta de la vivienda de Sergei.

En el arranque hoy de la pesquisa, el presidente de la investigación, Anthony Hughes, afirmó que la muerte de Sturgess "atrajo mucha menos atención" que el intento de envenenamiento a los Skripal e indicó que esta "continúa siendo una investigación sobre la repentina muerte de una persona totalmente privada".

Por su parte, el asesor Andrew O'Connor, parte de la investigación, destacó que la víctima "vivió una vida totalmente apartada de la política y las relaciones internacionales" y se vio "atrapada en un fuego cruzado" que derivó en una muerte cuyas circunstancias fueron "extraordinarias, únicas, de hecho".

Cuando la mujer se aplicó el veneno "inconscientemente" en su propia piel, "no tenía ninguna constancia del peligro mortal que afrontaba, ya que el líquido altamente tóxico se había camuflado, cuidadosa y deliberadamente, dentro de un frasco de perfume".

"Es más, la evidencia sugerirá que el frasco, que contenía suficiente veneno como para matar a miles de personas, debió haber sido dejado en algún lugar público creando el riesgo obvio de que alguien lo encontrara y se lo llevara", dijo.

Quienes lo dejaron, "mostraron un indecente desprecio por la vida humana", señaló O'Connor.

Apuntó asimismo que "no es posible investigar de manera adecuada la muerte de Dwan sin entender antes las circunstancias del intento de envenenamiento de los Skripal".

La pesquisa planteará, entre otras cuestiones, si el novichok que mató a la mujer, madre de tres hijos, fue el mismo tipo de elemento químico que envenenó el exepía, su hija y a un policía formaba parte de un mismo lote; y se cuestionará si el Reino Unido adoptó "los pasos adecuados para proteger a los Skripal del ataque y al público en general de daños colaterales".

O'Connor dijo, además, que se tratará de esclarecer si es posible que "se cometieran errores" a la hora de proteger a los Skripal "que indirectamente contribuyeron a la muerte de Dawn". EFE

Guardar