Luce López-Baralt recoge el premio Teresa de Ávila con "alegría infinita" por recibir "carta de ciudadanía abulense"

La escritora puertorriqueña Luce López-Baralt ha recogido el Premio de las Letras Teresa de Ávila y ha ofrecido un discurso en el que ha destacado su admiración por los místicos abulenses y la "alegría infinita" con la que ha recibido el galardón, ya que con él se considera "parte de esta ciudad".

En el acto de entrega del premio, el alcalde de Ávila, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, ha destacado el hecho de que se le entregue este galardón a una estudiosa de los místicos abulenses, un hecho que "cierra el círculo" de una trayectoria como la que ha desarrollado López-Baralt a lo largo de su vida.

Así, Sánchez Cabrera ha recalcado que con este galardón la autora se convierte en "una ilustre abulense", algo que la protagonista ha recibido con "alegría infinita" por considerarse ya parte de la ciudad.

La autora ha mostrado su agradecimiento por obtener esta "carta de ciudadanía abulense", que la "hermana" con los místicos santa Teresa de Jesús y san Juan de la Cruz, a los que ha estudiado a lo largo de su vida.

El Premio de las Letras Teresa de Ávila es un galardón que reconoce la trayectoria de un escritor cuya obra, en su totalidad o en su mayor parte, esté escrita en lengua castellana, con independencia del género o los géneros en los que la haya desarrollado.

De carácter bienal, está dotado con 10.000 euros, una escultura del artista abulense Emilio Sánchez y la publicación de una obra del autor galardonado en la colección 'Castillo Interior' que edita el Ayuntamiento de Ávila.

En su anterior edición, el escritor extremeño Luis Landero fue el distinguido con un premio que cuenta en su trayectoria con nombres como Juan Mayorga, Fernando Arrabal, Clara Janés, Antonio Colinas o Juan Gelman.

López-Baralt ha apuntado que posiblemente sea la galardonada que acude desde más lejos para recibir este premio y ha reconocido que ha hecho "lo indecible con tal de venir".

Ha recordado que llega de "las ínsulas extrañas que cantó San Juan de la Cruz", las que el místico "soñó en su verso". Pero ha recalcado que ha llegado para "adquirir una segunda carta de naturaleza, la ciudadanía abulense" que considera que le hermana con los místicos que ha estudiado.