Las autoridades de Italia han fletado este lunes un barco militar con un primer grupo de solicitantes de asilo que recalarán en Albania, donde el Gobierno de Giorgia Meloni pactó la apertura de centros de acogida desde los que estas personas esperarán a que se tramiten sus peticiones.
Por iniciativa del Ministerio del Interior, una nave de la Armada ha partido este lunes desde un puerto de la isla de Lampedusa, según la agencia de noticias AdnKronos. La semana pasada, el Gobierno ya había adelantado que los centros estaban listos para comenzar a acoger a los migrantes rescatados en el mar Mediterráneo.
Las autoridades albanesas e italianas firmaron el acuerdo para la apertura de estos centros en noviembre de 2023, lo que desató una ola de críticas de organizaciones defensoras de los Derechos Humanos, entre ellas la ONU. La ONG Amnistía Internacional ha reiterado este lunes su "profunda preocupación".
"En suelo albanés, pero bajo jurisdicción italiana y europea, se examinar las solicitudes de asilo de personas migrantes y se retendrá a las personas a la espera de su expulsión y repatriación, con una aplicación extraterritorial de la detención administrativa", ha lamentado Amnistía en redes sociales.
Meloni prometió al llegar al poder que endurecería las políticas migratorias, lo que se ha traducido en estos últimos años también en una mayor presión sobre las ONG que efectúan operaciones de rescate en el Mediterráneo. En lo que va de año, Italia ha registrado unas 53.000 llegadas, una cifra considerablemente inferior a las casi 140.000 del mismo periodo del año pasado, según datos del Ministerio del Interior actualizados hasta este lunes.