El primer ministro islandés pide a la presidenta la disolución del Parlamento

Copenhague, 14 oct (EFE).- El primer ministro islandés, Bjarni Benediktsson, pidió este lunes a la presidenta del país, Halla Tómasdóttir, la disolución del Parlamento y la convocatoria de elecciones anticipadas después de que colapsase su Gobierno de coalición que aúna a centroderecha y ecologistas.

La ruptura del Ejecutivo se debe a "visiones divergentes" entre los tres partidos que lo conforman y no había esperanza de solución, declaró antes de la reunión con Tómasdóttir el centroderechista Benediktsson a la televisión pública RUV y subrayó que "la única opción responsable es convocar nuevas elecciones".

La presidenta, que asumió el cargo hace solo tres meses, afirmó tras recibir la petición del primer ministro que se entrevistará con todas las fuerzas políticas con representación parlamentaria y tomará una decisión esta semana sobre la disolución del Legislativo.

Ya que debe mediar un plazo máximo de 45 días, la televisión pública islandesa RUV parte de que los nuevos comicios podrían celebrarse posiblemente el próximo 30 de noviembre, una eventualidad para la que ya ha empezado a prepararse la comisión electoral.

Benediktsson es el líder del centroderechista Partido de la Independencia, la fuerza política con más escaños, y asumió el cargo de primer ministro -un puesto que ya había ocupado brevemente en 2017- tras la dimisión en abril de este año de la ecologista Katrín Jakobsdóttir.

Hasta ahora presidía una coalición del Partido de la Independencia con el centroderechista Partido Progresista, liderado por Sigurdur Ingi Jóhansson, y los ecologistas del Movimiento de Izquierda-Verde, encabezados por Svandís Svavarsdóttir, en pie desde 2017.

En 2021 el tripartito incluso mejoró sus resultados y aumentó de 33 a 38 el número de escaños del total de 63 con los que cuenta el Parlamento; las próximas elecciones estaban previstas para otoño de 2025.

La decisión de romper la coalición, que Benediktsson anunció de forma inesperada este domingo, tomó por sorpresa a sus socios de Ejecutivo, según declararon sus líderes posteriormente.

El primer ministro argumentó con los crecientes desacuerdos en diversos ámbitos, entre ellos en materia migratoria, así como las nuevas medidas para la producción de energía verde.

Este mes, el Ministerio de Justicia propuso realizar reformas legales para restringir el número de solicitantes de asilo a los que se reconoce como refugiados y reducir el acceso gratuito de los peticionarios a un abogado.

El Partido de la Independencia está cosechando sus peores resultados históricos en los sondeos de opinión, con solo un 14,1 % de apoyos en septiembre según una encuesta realizada por Gallup, por detrás de la Alianza Socialdemócrata y del Partido de Centro.

Las tres fuerzas de la coalición apenas suman un 24,6 %, mientras que el apoyo al Ejecutivo se sitúa en el 24 %, según RUV el porcentaje más bajo al que ha caído jamás un Gobierno en la historia de Islandia desde que empezaron a realizarse sondeos. EFE