Guayaquil (Ecuador), 14 oct (EFE).- Un tribunal de Ecuador sentenció a nueve años y cuatro meses de prisión a un hombre por abusar sexualmente de su hijastra, quien tenía 7 años cuando ocurrieron los hechos, en 2018, según informó la Fiscalía en un comunicado.
El hombre recibió así la máxima pena agravada por el delito de abuso sexual, que cometió sistemáticamente contra la niña, cuando la madre y la abuela de ella no estaban en la casa.
Además de los años de cárcel, el sentenciado de 38 años deberá pagar una indemnización de 5.000 dólares a la víctima, quien recibió medidas de protección a su favor.
Según el Ministerio Público, durante su testimonio anticipado, la niña narró a la psicóloga las amenazas y advertencias de las que fue víctima en su entorno cercano, que no solo incluyó al agresor, sino también a su madre y a su abuela.
El caso llegó a las autoridades después de que la menor hizo un dibujo en el que "evidenciaba un acto sexual" mientras se encontraba en la escuela, en 2018. Con ese bosquejo, el Departamento de Consejería Estudiantil de la institución educativa levantó un informe sobre los hechos de violencia.
La niña, a su corta edad, también se había ido de su casa en dos ocasiones, intentando huir de su agresor, pues ni su madre ni su abuela creyeron en su palabra. En la última ocasión, agentes de la Policía especializada para niños y adolescentes (Dinapen) la dejaron en custodia de la abuela materna.
"Los abusos sexuales cometidos por el agresor destruyeron la indemnidad sexual de la víctima, provocando comportamientos hipersexuales", indicó la fiscal que llevó el caso. El agresor también obligaba a la menor a ver videos sexuales y le obligaba a guardar silencio.
"Estos actos inusuales fueron detallados por la madre y la abuela en la audiencia de juicio, donde ambas defendieron la inocencia del procesado, sin dar credibilidad al relato de la niña y afirmando que ella 'actuaba por celos'", explicó la Fiscalía.
El informe de entorno social realizado por un perito determinó que la custodia de la menor que ahora posee la abuela "debe ser analizada", ya que la señora "trató de silenciar a la niña bajo la amenaza de la 'cárcel para niños'".
Al no lograrlo, intentó cargar la responsabilidad del delito en su nieta, a la que describió como 'incontrolable', ubicándola como el problema, o la 'provocadora', agregó en el comunicado
La maestra y la psicóloga de la menor dijeron ante los jueces que, tras hacer el dibujo, ella les reveló el delito que su padrastro cometía con sus propias palabras.
El Ministerio de Salud deberá proporcionar tratamiento psicológico a la ahora adolescente, mientras que el Ministerio de Inclusión Económica y Social tiene la obligación de efectuar un seguimiento integral e informar a los jueces sobre los avances en su proceso de recuperación psicológica y social. EFE
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