Colombo, 13 oct (EFE).- Los hermanos Gotabaya y Mahinda Rajapaksa, que ostentaron durante años los cargos de mayor peso en la política de Sri Lanka, hasta su salida forzada por la revuelta popular de 2022, se mantendrán en un segundo plano después de que ninguno de ellos se presentase como candidato a las elecciones generales de noviembre.
El nombre de ninguno de estos dos expresidentes figura entre los 8.000 candidatos que concurrirán a los comicios generales del próximo 14 de noviembre, y cuyo plazo para presentar las nominaciones concluyó el pasado viernes.
"Algunos miembros de mi familia decidieron no presentarse, no recientemente sino justo después de las últimas elecciones parlamentarias", dijo hoy a EFE Namal Rajapaksa, hijo de Mahinda que también ejerce como político, y que fue la cuarta opción más votada en los comicios presidenciales del mes pasado, con el 2,57 % del escrutinio.
Como ya sucediera en los comicios presidenciales, Namal es la única opción de los Rajapaksa en las generales, muestra de un aparente cambio de ciclo en esta poderosa familia de políticos que ha ocupado los principales cargos de los Ejecutivos esrilanqueses en las últimas dos décadas.
Sin embargo, el nombre de Namal, miembro del Sri Lanka Podujana Peramuna (SLPP) solo figura en la lista nacional, que reparte entre los partidos un reducido número de escaños en función de la proporción de votos que reciban.
"Entrar al Parlamento a través de la lista nacional fue una decisión del partido que me permitió liderar la campaña y apoyar a otros candidatos. Como organizador nacional, mi objetivo es asegurar que el partido esté bien preparado", sostuvo Namal.
Según esta decisión, el hijo de Mahinda y sobrino de Gotabaya aspirará a uno de los 29 asientos reservados en el Parlamento para los candidatos de la lista nacional, siendo 196 el resto de escaños que se reparten de manera directa en los comicios.
No obstante, está por ver el desempeño de su partido, después de que Namal pasara inadvertido en las presidenciales del pasado septiembre, cuando recibió menos de 350.000 votos, muy lejos de los 5,6 millones que obtuvo el candidato de la coalición Poder Popular Nacional (NPP) y actual presidente, Anura Dissanayake.
"La victoria electoral del NPP de centroizquierda indicó claramente al clan (Rajapaksa) y a sus seguidores que cualquier intento futuro de buscar un mandato popular fracasará y que la mejor alternativa para ellos sería dar un paso atrás y mantener un perfil bajo durante algún tiempo", dijo a EFE el analista político Aruna Kulatunga.
Gotabaya se vio obligado a abandonar el país y dimitir en 2022 como presidente tras las masivas manifestaciones que le culpaban, junto a su hermano Mahinda, entonces primer ministro, de gestionar mal la economía y sumir a Sri Lanka en una profunda crisis económica.EFE