Beirut, 13 oct (EFE).- El primer ministro libanés, Najib Mikati, pidió este domingo a la comunidad internacional que adopte una "postura determinante" contra Israel, después de que el jefe del Ejecutivo israelí, Benjamín Netanyahu, acusara a los cascos azules de la ONU de ser "escudos humanos" del grupo chií Hizbulá.
"Al primer ministro enemigo, Netanyahu, no le bastó con la agresión contra el Líbano, que se ha cobrado mártires, víctimas y una destrucción inefable", dijo Mikati en un comunicado de condena de las acusaciones del israelí versadas contra la misión de paz de la ONU en el Líbano (FINUL).
El libanés condenó que el Gobierno de Israel "insiste en desvelar su agresividad también hacia las fuerzas de la FINUL", tras acusarlas de ser "rehenes de Hizbulá" por no retirarse de sus posiciones a lo largo de la frontera entre el Líbano e Israel.
En este sentido, Mikati denunció que es "un nuevo capítulo de la actitud de un enemigo que no comparece ante la legitimidad internacional y sus resoluciones", mientras que pidió que las palabras de Netanyahu sean "un nuevo motivo para adoptar la postura adecuada" contra Israel.
Los cascos azules se encuentran en Líbano de conformidad con la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, que puso fin a la guerra de 2006 que durante poco más de un mes enfrentó a Israel y Hizbulá.
En los últimos días, la FINUL denunció que cinco de sus soldados han resultado heridos en incidentes atribuidos a Israel, cuyo Ejército invadió el sur de Líbano hace casi dos semanas en el marco de su campaña para desmantelar las capacidades militares de la formación armada, que está resistiendo la embestida de las tropas israelíes.
Netanyahu dijo que Israel hace "todo lo posible" por evitar el daño a los cascos azules, pero que la mejor manera de prevenir estos incidentes es sacarlos fuera del territorio, para lo que haría falta una decisión del Consejo de Seguridad. EFE