El Ministerio de Comercio de China ha avisado este sábado a la Unión Europea de que se abstenga de emprender conversaciones individuales con los fabricantes de automóviles sobre el precio de los vehículos, en paralelo a las negociaciones con Pekín sobre los derechos compensatorios a las importaciones de automóviles eléctricos chinos.
Semejante comportamiento, ha indicado el Ministerio en un comunicado, "sacudiría los cimientos de las negociaciones y la confianza mutua", habida cuenta de que "la parte china ha "demostrado la máxima sinceridad y flexibilidad" en las conversaciones.
El Ministerio aprovecha para pedir a la UE que envíe una delegación a China lo antes posible para continuar con la siguiente fase de consultas, después de que Bruselas rechazara anteriormente una propuesta de Pekín de que los automóviles eléctricos producidos en China se vendieran en Europa a un precio mínimo obligatorio de 30.000 euros.
Pekín esperaba que este paso evitara la introducción de derechos compensatorios de la UE para compensar los subsidios gubernamentales a la producción de vehículos eléctricos chinos.
A principios de octubre, una votación entre los estados miembros de la UE allanó el camino para los aranceles a los automóviles eléctricos de China. Esto significa que la Comisión Europea puede decidir introducir aranceles de hasta el 35,3 por ciento.
Por su parte, China respondió el martes con una medida provisional contra el brandy europeo. Según el Ministerio de Comercio, los importadores de brandy tendrán que pagar un depósito del 30,6 por ciento al 39 por ciento del valor de las mercancías a las aduanas chinas. La Comisión Europea respondió que tomaría medidas contra la medida en la Organización Mundial del Comercio (OMC).