La Unión Europea explora opciones para hacer voluntario el fondo que financia el apoyo militar a Ucrania, y de esta forma, sortear el bloqueo que plantea desde hace un año y medio Hungría, que impide la reembolso a los Estados miembros de 6.600 millones de euros en asistencia al Ejército ucraniano.
La posición de Budapest, contraria al suministro de armas a Kiev, mantiene congelados fondos europeos a las ayudas bilaterales que cada Estado miembro entrega a Ucrania mediante el Mecanismo Europeo para la Paz. En este sentido, el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, ha presentado distintos escenarios para salvar el bloqueo húngaro y hacer que las contribuciones económicas al fondo sean voluntarias.
"Esto puede desbloquear la situación porque no necesitarías a todos (los Estados miembros) para el desembolso, que es como funciona el Mecanismo Europeo para la Paz", explica un alto cargo de la UE que reconoce que el veto de Hungría se prolonga demasiado tiempo y daña la voluntad de la UE de mantener el apoyo a Kiev frente a la invasión rusa.
Fuentes diplomáticas consultadas por Europa Press subrayan que la opción no tiene por qué ser crear un nuevo fondo sino cambiar el modo en el que funciona el instrumento actual para que pase a nutrirse de aportaciones voluntarias de los Estados miembros. Actualmente los países del bloque aportan financieramente a este plan de acuerdo a su peso económico en la UE.
De hecho el reglamento de funcionamiento del Mecanismo Europeo para la Paz prevé la gestión de una "contribución financiera voluntaria efectuada por un Estado miembro o por un tercero" que se dedicaría a "un proyecto determinado en apoyo de la operación o medida de asistencia". Mediante este método, Noruega ha participado en el pasado en actividades del fondo europeo.
La idea de adoptar este tipo de funcionamiento fue puesta sobre la mesa hace meses por Alemania, si bien hasta ahora había dudas legales sobre cómo proceder, han explicado las fuentes. Además, para dar el visto bueno a estas contribuciones voluntarias se necesitaría de la unanimidad de la UE a nivel de embajadores, incluido el representante húngaro.
En total, la UE ha elevado a 3.500 millones de euros el instrumento con el que financia su política de Defensa y usa desde 2022 para suministrar armas a Ucrania en el contexto de la invasión rusa. Desde hace meses, Borrell critica el "lamentable" bloqueo de Hungría, que obstaculiza la financiación europea a la entrega de armamento, y ha prometido a Kiev encontrar una solución para acabar con la parálisis en este frente.