Washington, 09 oct (EFE).- New York Liberty buscará a partir de ste jueves su primer título de la WNBA en una final sin antecedentes contra Minnesota Lynx, que quiere convertirse en el equipo más laureado de la liga con su quinto título.
Liberty, un equipo nutrido de estrellas y construido para ganar, llega a la final tras haber terminado como líder de a fase regular con un balance de 32 victorias y 8 derrotas.
En el 'playoff' eliminó en cuartos de final al Atlanta Dream (2-0) y en semifinales a Las Vegas Aces (3-1), campeón en 2022 y 2023.
Lynx, por su parte, fue segundo en la fase regular con dos victorias menos (30-10) que Liberty y llega a la final tras deshacerse en cuartos de Phoenix Mercury (2-0) y en semifinales de Connecticut Suns (3-2).
Con Sabrina Ionescu y Breanna Stewart como líderes del equipo, la actual plantilla de las Liberty está llamada a deshacerse de su maldición en las finales: han perdido cinco de cinco. La última de ellas el año pasado, precisamente contra las Aces.
Maldición aparte, son sobre el papel las favoritas, por nombres, superioridad durante la fase regular y por haber confirmado que no les tiembla el pulso en el momento decisivo al pasar como una apisonadora ante A'ja Wilson -MVP de la temporada- y sus compañeras de Las Vegas.
Contarán, además, con el factor cancha a favor con los primeros dos partidos en el Barclays Center de Brooklyn mañana y este domingo, antes de que la serie se traslade a Minneapolis para disputar, al menos, en tercer juego.
Delante tendrán a Lynx, un equipo por el que pocos apostaban a inicio de la temporada pero que ha sabido tomarle la medida a las Liberty y que busca convertirse en la franquicia con más títulos de la WNBA.
Ahora, con 4, comparten ese honor con Seattle Storm y las desaparecidas Houston Comets.
Lynx dominó el campeonato en la pasada década de 2010 al conquistar los títulos en 2011, 2013, 2015 y 2017. Pero hacía siete años que no alcanzaban una final.
El equipo tiene su liderazgo indiscutible en Napheesa Collier, que en este 'playoff' ha promediado 27,2 puntos por partido y 9,3 rebotes.
"Becky Hammon -entrenadora de las Aces- nos describió como buenas jugadoras (que forman) un gran equipo. Eso es lo que hace que este equipo sea tan especial: no asustamos a nadie. No creo que en ningún momento de la temporada alguien haya pensado: 'Sí, tienen una verdadera oportunidad de ganar un campeonato'", dijo Cheryl Reeve, entrenadora de las Lynx.
Las jugadoras de Reeve, para muchos la mejor entrenadora de la historia de la WNBA, sufrieron en su serie de semifinales para derrotar a las Suns, aunque resolvieron con solvencia el quinto y último partido disputado anoche.
Hay cuatro precedentes esta temporada entre Liberty y Lynx, con tres victorias para las de Minnesota y solo una para las de Nueva York.
Uno de estos precedentes fue la final de la Copa, en la que las Lynx alzaron el título al derrotar 94 a 89 a las Liberty. EFE