Nairobi, 8 oct (EFE).- El presidente de Uganda, Yoweri Museveni, ha expresado su voluntad de mediar en el conflicto en curso en Sudán si las partes enfrentadas aprueban su participación, informó este martes el Gobierno ugandés.
"Estoy dispuesto a mediar en el conflicto si están de acuerdo", afirmó Museveni en un comunicado, tras reunirse este lunes en su residencia oficial de Entebbe con el enviado especial de las Naciones Unidas para Sudán, Ramtane Lamamra.
El mandatario reiteró su compromiso de "aunar esfuerzos para restablecer la paz en Sudán, enfatizando que la causa fundamental del conflicto radica en la promoción de políticas identitarias, que desestabilizan a un país tan diverso como Sudán", según la nota oficial emitida por el Ministerio de Asuntos Exteriores ugandés.
El presidente instó a las facciones en conflicto a "acordar un alto el fuego y entregar el poder al pueblo de Sudán".
Por su parte, Lamamra, aseguró a Museveni el pleno apoyo de las Naciones Unidas para resolver el conflicto.
"Señor presidente, si hay algo que la ONU pueda hacer para ayudar a restaurar la paz en Sudán, involúcrenos. Estamos listos y dispuestos a trabajar con usted", afirmó el enviado especial, según el comunicado.
Lamamra también destacó la crisis humanitaria de Sudán, al matizar que, si bien se han hecho esfuerzos para asegurar un alto el fuego, los combates continúan y los civiles siguen en riesgo.
"A pesar del conflicto en curso y el flujo de armas a ambos lados, todavía existe una oportunidad de avanzar y asegurar un alto el fuego para abordar las necesidades humanitarias urgentes", agregó el enviado especial.
La reunión se celebró después de que el Ejercito de Sudán lanzara este domingo una ofensiva contra los paramilitares de las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) en la ciudad de El Fasher, capital de Darfur del Norte, tras tres meses de mantenerse a la defensiva en ese enclave, uno de los últimos reductos del Ejercito en esa región sudanesa.
La guerra en Sudán estalló en abril de 2023 por el desacuerdo entre el Ejército y los paramilitares respecto a la inclusión de los segundos en el poder surgido tras el golpe de Estado de 2021, que acabó con el intento de democratización del país tras el derrocamiento en 2019 del expresidente Omar al Bashir.
El conflicto ha causado unos 20.000 muertos, 33.000 heridos, 7,9 millones de desplazados internos y 2,1 millones de refugiados en otros países, según la ONU. EFE