Bamako, 8 oct (EFE).- El Ejército de Mali informó este martes haber recuperado los cuerpos de "hermanos" muertos durante una batalla el pasado julio en el norte del país, junto a la frontera con Argelia, contra las fuerzas independentistas norteñas y los terroristas de Al Qaeda, en la que fallecieron al menos un centenar de soldados y mercenarios de Wagner.
En un comunicado, el Estado Mayor del Ejército indica que desde hace días lleva a cabo una "operación de control de zona" en la región de Kidal, al noroeste del país, una región controlada por los independentistas, enfrentados desde hace meses al gobierno golpista de Mali.
Se trata de la misma zona, cerca de la ciudad de Tinzaouatene, donde el pasado julio tuvo lugar una batalla que enfrentó al Ejército, ayudado por mercenarios del grupo ruso Wagner, a los secesionistas norteños y a terroristas de Al Qaeda, y en la que murieron decenas de militares malienses y mercenarios del grupo ruso (47 soldados y 84 mercenarios, según los secesionistas).
El grupo Wagner reconoció haber sufrido bajas, sin ofrecer un número, e informó de la muerte de uno de sus comandantes.
"Fue durante este avance cuando las Fuerzas Armadas, que llegaron a la zona de la emboscada donde se produjeron los violentos combates el pasado mes de julio, no lejos de la localidad de Tinzaouatene, recuperaron los restos de sus hermanos de armas caídos en el campo del honor", dice la nota.
Al Qaeda informa este martes en su canal de propaganda Al Zallaqa de que el Ejército intentó recuperar los cadáveres de sus militares muertos pero no lo consiguió, y añade que los terroristas se incautaron de dos drones suicidas cargados con explosivos y desactivaron artefactos improvisados en el lugar.
Sayid Ben Bila, dirigente del Marco Estratégico Permanente (CSP), que agrupa a los secesionistas y ejerce la autoridad de facto en amplias zonas del norte de Mali, afirmó a EFE que el convoy del Ejército salió de la ciudad de Kidal hace diez días, hizo una parada de varios días unos 180 kilómetros al noreste, en Tin-Essakou, y antes de llegar al lugar de la batalla mandaron una unidad de reconocimiento.
Según Ben Bila, los militares se desplazaron hasta allí con la intención de recuperar Tinzaouatene del control de los secesionistas, pero finalmente no atacaron y volvieron porque descubrieron, según su versión, "que no estaban en condiciones de combatir" ante la preparación de los independentistas.
"Estábamos preparados para enfrentarnos con ellos, pero no llegaron", explicó, y añadió que no consiguieron recuperar cadáveres de soldados muertos en julio, lo que considera una "excusa". EFE