Las autoridades de Rusia han dicho este lunes tener información "fiable" que involucra "de forma directa" a los gobiernos de Estados Unidos y Reino Unido en el ataque contra el gasoducto Nord Stream que tuvo lugar en septiembre de 2022 en el mar Báltico. Así lo ha expresado el jefe del servicio de Inteligencia exterior de Rusia, Sergei Narishkin, que ha tildado lo sucedido de "ataque terrorista". "Tenemos informaciones que apuntan a esta implicación directa de Estados Unidos y Reino Unido", ha aseverado antes de afirmar que "fueron saboteadores profesionales de servicios especiales anglosajones los que participaron en la organización, preparación y puesta en marcha de este ataque". Asimismo, ha acusado a los servicios especiales de algunos países de Occidente, pero sobre todo al "MI-6 británico" de preparar a "saboteadores ucranianos para llevar a cabo misiones contra centrales nucleares de Rusia", según informaciones de la agencia rusa de noticias TASS. "Los datos disponibles indican que los servicios de Inteligencia occidentales, principalmente el MI-6 británico, estaban entrenando sistemáticamente a grupos de sabotaje y reconocimiento ucranianos para organizar estas acciones", ha dicho Narishkin durante una cumbre a la que han asistido los jefes de los organismos de seguridad y servicios de Inteligencia de los países de la Comunidad de Estados Independientes (CEI) en Astaná, la capital, de Kazajistán. En este sentido, ha alertado de que el país se ha enfrentado recientemente a una amenaza terrorista sin precedentes por parte de terceros países. "Rusia se ha enfrentado a una forma sin precedentes de amenaza terrorista que proviene no solo de bandas terroristas o terroristas solitarios, sino de un Estado o, mejor dicho, de un grupo de Estados", ha explicado Narishkin. Asimismo, ha acusado a la Inteligencia de Estados Unidos de compartir con Ucrania la información necesaria para realizar ataques contra infraestructuras civiles rusas. "Según la información de la Inteligencia rusa, desde el inicio del conflicto Estados Unidos ha estado transmitiendo información a Kiev, que luego utiliza estos datos para atacar infraestructuras civiles rusas", ha puntualizado.