Países Bajos lanza una investigación sobre la violencia contra migrantes en Sudán y Libia

Investigación de la fiscalía y la gendarmería de Países Bajos sobre el tráfico de personas y la violencia contra migrantes del Cuerno de África en su ruta hacia Europa

Guardar

La Haya, 7 oct (EFE).- La fiscalía y la gendarmería de Países Bajos lanzaron este lunes una investigación sobre la violencia que sufren los migrantes procedentes del Cuerno de África en Sudán y Libia, durante su camino migratorio hacia Europa, con un enfoque centrado en las redes criminales que rodean el tráfico de personas a través del Mediterráneo.

En un llamamiento a las víctimas, ambas instituciones neerlandesas tratan de ponerse en contacto con los refugiados que huyeron de países de África Oriental como Somalia, Yibuti, Eritrea y Etiopía, para que cooperen con la investigación de redes criminales “involucradas en el tráfico de personas” a través de la conocida como Ruta del Mediterráneo Central hacia Europa.

“Diversas fuentes muestran que aún existe mucha violencia contra los migrantes en su camino hacia Europa, especialmente en Sudán y Libia. En estos países, miles de personas están encerradas en campamentos y solo se les permite continuar con su viaje si sus familiares pagan una tarifa sustancial. Esto a menudo implica una violencia extrema”, lamenta la gendarmería (Marechaussee, en neerlandés).

En un caso anterior, varios sospechosos de una red criminal involucrada en la trata y tráfico de personas a través del Mediterráneo fueron identificados y arrestados por la gendarmería, y esta nueva investigación se centra en otras redes en esa misma ruta, en busca de la identificación de nuevos sospechosos, para lo que “las declaraciones de víctimas y testigos son muy importantes”.

“¿Huiste del Cuerno de África entre 2016 y 2024, y realizaste el viaje hacia Europa a través de Sudán y Libia?. Y durante ese viaje, ¿fuiste víctima o testigo de trata de personas, extorsión y/o violencia (sexual)? Si es así, la Policía Militar de Países Bajos quiere ponerse en contacto contigo”, dice la Marechaussee en su llamamiento.

Las autoridades neerlandesas permiten a las víctimas contactarlos en su propio idioma, e incluso instan a una conversación “sin compromiso” para aquellos que no estén seguros de querer declarar oficialmente.

El año pasado, la Justicia neerlandesa celebró un juicio contra varios sospechosos, incluido un eritreo líder de una de las bandas, por participación en una organización internacional involucrada en “crímenes migratorios” que incluyen “la trata de personas, secuestros, extorsión y violencia, también la sexual”.

Sus víctimas son en su mayoría migrantes de Eritrea que viajaban a Países Bajos y que, durante su viaje, organizado por traficantes de personas, fueron objeto de “una violencia brutal”, según describió el fiscal. “En el camino, fueron encerrados en campamentos de traficantes de personas en Libia, mientras sus familias en Países Bajos eran extorsionadas para pagar dinero”, añadió.

Países Bajos trabaja con la Corte Penal Internacional (CPI), Europol, Interpol y Suecia, entre otros, en sus investigaciones internacionales contra la violencia contra los refugiados del Cuerno de África, y también ha creado un equipo conjunto de investigación (JIT) con Italia, el país donde llegan los migrantes cuando intentan cruzar desde Libia.

La ruta del Mediterráneo Central es la más utilizada, pero también la más mortal de las usadas por migrantes que tratan de llegar a Europa y se ha cobrado la vida de miles de personas. EFE

Guardar