El mayor sindicato italiano amenaza con la huelga general ante posibles recortes de Meloni

El sindicato CGIL de Italia denuncia posibles recortes en sanidad y educación por el Gobierno de Giorgia Meloni y exige preparativos para una huelga general en respuesta a medidas de austeridad

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Roma, 7 oct (EFE).- El principal sindicato italiano, la CGIL, prevé el regreso a las "recetas de la austeridad" en los próximos Presupuestos del Gobierno ultraderechista de Giorgia Meloni y consideró "necesario" prepararse para una eventual huelga general.

La Asamblea General de la CGIL ha aprobado las líneas de acción para las próximas semanas y ha arremetido contra el Ejecutivo por el plan fiscal estructural a medio plazo que ha remitido a Bruselas "sin ningún tipo de negociación con las partes sociales".

El sindicato avisó que este documento, antesala del borrador presupuestario y exigido por las nuevas normas comunitarias, "vinculará las políticas económicas y sociales para los próximos siete años y marca un regreso a las políticas de austeridad".

En concreto, la CGIL estima que estos planes implicarán cada año un recorte de 13.000 millones de euros.

"En este contexto, la próxima ley de Presupuestos inaugurará una larga temporada de austeridad y recortes a la sanidad, la educación y la investigación, a la asistencia social, a los convenios del empleo público, a los entes locales y a las inversiones", avisa.

Por eso, la CGIL mantuvo la convocatoria de varias huelgas en sectores como el siderúrgico, el 18 de octubre; la Administración Pública, un día después; de los pensionistas, del 28 al 31 de este mes, o de transportes el 8 de noviembre.

Pero el sindicato considera "necesario" que las protestas deriven en una huelga general y ha pedido a sus organizaciones locales que se preparen y verifiquen con otros aliados su puesta en marcha, según se lee en el documento de la asamblea.

La semana pasada el ministro de Economía, Giancarlo Giorgietti, vaticinó "sacrificios para todos" en las próximas cuentas y volvió a plantear un impuesto a los beneficios extraordinarios no solo de bancos sino también de la industria y otros sectores de la economía.

Esto irritó a la oposición de izquierdas y dentro de la misma coalición de Gobierno por lo que este fin de semana pidió "tranquilidad", matizando que esos sacrificios serán requeridos "a quienes tengan una mayor capacidad contributiva".

"Se distinguir entre quienes hacen sacrificios y quienes los pueden hacer. Estad tranquilos y serenos. Soy hijo de un pescador y de una obrera textil y os digo con gran tranquilidad que estamos de la parte que trabaja y produce", dijo durante la convención anual de su partido, la Liga, en la localidad de Pontida (norte). EFE

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