São Paulo, 6 oct (EFE).- El vicepresidente brasileño, Geraldo Alckmin, votó este domingo en las elecciones municipales junto a la candidata a alcaldesa de São Paulo, Tabata Amaral, que tiene apoyo de algunos ministros, pero no del mandatario, Luiz Inácio Lula da Silva.
Amaral, como el propio Alckmin, es miembro del Partido Socialista Brasileño (PSB), que integra la coalición de Gobierno, pero disputa sus propios espacios en los ámbitos municipal y regional.
La candidata socialista a la Alcaldía de São Paulo tiene 30 años, es diputada federal y, según las encuestas, cuenta con una intención de voto en torno al 10 %, lo que la deja fuera de una eventual segunda vuelta.
En declaraciones a periodistas, diferenció claramente su posición de apoyo a la gestión de Lula de las elecciones municipales, que "son otra cosa", según aclaró.
El Gobierno del líder progresista está constituido por una amplia coalición de doce formaciones de casi todo el arco político y, en el caso de São Paulo, Lula se ha inclinado por respaldar a Guilherme Boulos, candidato del Partido Socialismo y Libertad (PSOL).
Boulos es uno de los favoritos para avanzar a una segunda vuelta, que parece casi garantizada en las elecciones paulistas.
Según las encuestas, está empatado en torno a un 25 % con el actual alcalde, Ricardo Nunes, apoyado por Jair Bolsonaro, y con el candidato Pablo Marçal, un recién llegado a la política y radical de ultraderecha aún más extremo que el exmandatario, que ha dividido a ese movimiento.
En el caso de la ultraderecha, esa división pudiera trasladarse al espacio nacional y parece mucho más profunda que la provocada por las elecciones municipales en el progresismo, que se restringe a la coyuntura local. EFE