Este sábado, 5 de octubre, finalizaba el Trofeo Xacobeo con el Bribón del Rey Juan Carlos, que conseguía el cuarto título europeo en la división de Clásicos de la clase seis metros. Por la noche, el Real Club Náutico de Sanxenxo celebraba la cena de clausura con la entrega de los galardones. El Rey Juan Carlos asistió y posó ante los medios de comunicación con una gran sonrisa y muy bien acompañado por su hija, la Infanta Elena, que desde hace unos años no se pierde las visitas de su padre y viaja hasta el norte para disfrutar de este afición que comparte con él. Además, Simoneta Gómez-Acebo, sobrina del monarca, no dudó en asistir también. Una visita sorpresa que nadie esperaba y que se produce en un momento en el que el emérito está en el punto de mira debido a los audios que han salido a luz con Bárbara Rey. Sin embargo, parece que el emérito ha hecho oídos sordos y ha disfrutado al máximo de estas dos semanas en Sanxenxo con sus amigos y familiares. Sus hijas, su hermana, sus sobrinos... todos han pasado por allí, a excepción del Rey Felipe VI y la Reina Letizia, a los que vio en Marín cuando viajó para reunirse con su nieta, la Princesa Leonor. El emérito ha contado en este viaje con el apoyo incondicional de los suyos, quienes se han mantenido en un perfil bajo y tampoco han querido comentar nada acerca de las fotografías de este con Bárbara Rey que salieron publicadas hace dos semanas.