Moscú, 5 oct (EFE).- La Fiscalía rusa ha pedido siete años de cárcel contra el ciudadano estadounidense Stephen Hubbard, de 72 años, capturado en Ucrania mientras combatía como mercenario contra el Ejército ruso.
Según la acusación, el estadounidense "merece el castigo de siete años en una cárcel de máxima seguridad", informó hoy la agencia Interfax, que cita fuentes en los órganos de seguridad.
Al mismo tiempo, el fiscal consideró atenuante la edad del acusado y también el hecho de que esta semana Hubbard admitió durante una visita judicial haber participado brevemente como mercenario extranjero en la contienda.
La participación en un conflicto armado en calidad de mercenario es condenada en Rusia, en virtud del artículo 359 del código penal, con penas que van de los 7 a los 15 años de cárcel.
Según informó el Tribunal Urbano de Moscú, el juez dictará el fallo el 7 de octubre, coincidiendo con el 72 cumpleaños del presidente ruso, Vladímir Putin.
La Fiscalía mantiene que en febrero de 2022 el imputado firmó un contrato con el batallón de defensa territorial de la ciudad ucraniana de Izium, en la región nororiental de Járkov, a cambio de menos de mil dólares mensuales.
Añadió que Hubbard pasó entrenamiento militar, recibió equipamiento y armas, y "participó en el conflicto armado" hasta abril de 2022, cuando fue capturado por el Ejército ruso.
El estadounidense, un jubilado proveniente de Michigan, vivía en Ucrania "con una mujer a la que llamaba su esposa" desde 2014, según la agencia RIA Nóvosti.
En mayo pasado una usuaria de Facebook que se identificó como Trisha Hubbard Fox afirmó que su hermando "había sido secuestrado" en Ucrania por soldados chechenos, quienes presuntamente le habrían golpeado.
Moscú ha utilizado en el pasado a presos estadounidenses como moneda de cambio para garantizar el retorno de rusos retenidos en cárceles estadounidenses.
El canje más reciente tuvo lugar el pasado 1 de agosto y se convirtió en el mayor, que incluía a espías, entre Rusia y Occidente desde 1985, al intercambiar a 24 personas.EFE