Nueva Delhi, 5 oct (EFE).- Al menos diez personas murieron en la noche del viernes al sábado en el noreste de la India, en varios deslizamientos de tierra, según confirmó en un comunicado la Oficina del jefe de Gobierno del estado de Meghalaya.
El departamento del dirigente de Meghalaya, Conrad K. Sangma, precisó que tres personas fallecieron en la aldea de Dalu y siete en la localidad de Hatiasia Songma, según informó el periódico indio The Hindu.
Un episodio de fuertes lluvias ocurrido el viernes provocó inundaciones y desprendió tierra en varios puntos de la región de Garo Hills, en Meghalaya.
En el sur de Garo Hills, los deslizamientos de tierras también sepultaron un puente.
Según los medios indios, la Fuerza Nacional de Respuesta a Desastres de la India (NDRF, por sus siglas en inglés) está operando en la zona y llevando a cabo una operación de búsqueda y rescate de posibles supervivientes.
Las precipitaciones y sus consecuencias también han afectado al tráfico entre las localidades de Dalu y Baghmara.
Las inundaciones repentinas y los deslizamientos de tierra son habituales en la India, donde muchas infraestructuras no están preparadas para estos habituales episodios de lluvias.
En lo que va de 2024, al menos 120 personas han fallecido en los estados del noreste de la India en circunstancias similares.
El pasado 30 de julio, un grave episodio de lluvias intensas que azotaron al estado sureño de Kerala causaron más de 200 muertes.
El Departamento Meteorológico de la India (IMD) no mantiene ningún tipo de alerta ni para Meghalaya ni para el resto de estados nororientales de este país asiático, pero alerta de posibles precipitaciones en la región.
El 1 de octubre la India dio por finalizada la época de monzón de 2024, en la que fallecieron 1.059 personas en eventos climáticos extremos.
En los meses que preceden al periodo de lluvia -usualmente comprendido entre mayo y septiembre- las altas temperaturas que registran varias zonas del país, donde llegan a sobrepasarse los 50 grados, provocan también decenas de muertes atribuidas a golpes de calor. EFE