Tokio, 4 oct (EFE).- El Ministerio de Tierra, Infraestructura, Transporte y Turismo japonés llevará a cabo una investigación de emergencia en cinco aeropuertos locales tras la explosión de una bomba estadounidense sin detonar lanzada durante la II Guerra Mundial esta semana en el aeropuerto de Miyazaki (al sur de Japón).
Además de abrir una investigación en el aeropuerto de Miyazaki, las autoridades explorarán otros tres aeropuertos en Sendai (noreste de Japón), Fukuoka y Naha (sur del archipiélago) que fueron antiguamente emplazamientos de instalaciones militares japonesas.
Las bombas sin estallar del aeropuerto de Miyazaki estaban enterradas en los arcenes, extremos de la pista de rodaje, donde el asfalto es más fino que en las pistas y la nueva investigación se centrará en estas zonas utilizando una sonda magnética para encontrar metal bajo tierra.
"Aunque no hubo heridos, se trata de un incidente que podría afectar a la seguridad de las operaciones aéreas. He dado instrucciones para realizar un estudio magnético inmediatamente", declaró el ministro de Tierra, Infraestructura, Transporte y Turismo, Tetsuo Saito, este jueves sobre la nueva investigación.
El suceso del pasado miércoles causó el cierre de la pista y la cancelación de un total de 66 vuelos previstos durante la jornada, según la operadora del aeropuerto, que reanudó las conexiones aéreas con normalidad al día siguiente.
En el aeropuerto de Miyazaki ya se habían hallado explosivos sin detonar, dos bombas de 50 y de 250 kilos fueron encontradas en 2011 en una de sus vías de rodaje que se cree que fueron lanzadas por el Ejército estadounidense durante la II Guerra Mundial, mientras que en 2009 se halló otro explosivo durante unas obras aledañas al aeródromo. EFE